00 Ar JUANDARIO
—No os mováis de casa, hijas mias.
Era una advertencia prudente. o
- María de los: Dotóres temía que, en su ausencia, le arre-
bataran las niñas. :
+ El obligarla a ira casa del: duque de los Piero pre-
- cisamente cuando Juan Manuel no estaba en su casa, sino
cen su escuela, cumpliendo su deber, ¿no “podía ser una aña-" :
gaza, un lazo infernal, para robar las niñas aprovechán- :
* . dose de que ninguno de sus padres, podía defenderlas?.
“Por eso la madre hacía la advertencia 4
Dolorcitas, que era ya una mujercita, a pesar de stíS
pocos años, contestó: eS a >
_—NO, mamá. 5 tú lo mandas, nosotras te obedeceremos
siempre. o | 0
. —Gracias, hijas mias. No ais la puerta a nadie, hasta .
que yo venga. pee o E,
-—No la abriremos.
Y añora, to beso muy fuerte: y hasta Juego:
- Las volvió a besar, con un: trenesi que sólo ella sabia a
- qué causa óbedecia, y se marchó. 38
ADA temblando. de incertidumbre, suspirando con he
quietud. E
Era la primera vez en su “vida matrimonial que ocultaba. :
“una cosa a su esposo, y esto a Mari-Lola, tan fiel esposa, le"
parecía como una especie de traición, a pesar de la nobleza
de Su intención Y qa sacrificio no suponía su heroico: si
a Jencio. ?
: Nunca tuvieron ia el uno: para. el otro. o de
: Y este primer. secreto queella iba a tener para él, le: que ES
: mada como un remordimiento. Da
Por el camino leyó en la tarjeta de sia las da del.
: duque, se las aprendió de memoria, y ya LR a tmpad la
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