Full text: [Tomo] 5 (5)

  
  
  
4) th 
  
  
  
¡MALDITA! 5335 
—¿Te refieres a Isa y Emy?—preguntó Aflela, con to- 
NO de vivo reproche— ¡Mujer! 
—iQué mujer ni que niño muerto! Tú sabes, per- 
Tectamente que, en nuestra casa no entramos miás que 
hosotras cuatro... y el aire que se cuela por toas las ren- 
Gijas, Por no entrar ní el gato del segundo mete allí los 
biogtes, por que sabe que no hay na que echar al buche... 
Conque Emy y su hermana tién que ser las que nos ha- 
Yan largao el regalito... ¡Las muy...! 
Adela. se resistía a creerlo. 
—No pue ser, Paloma—inisistió— Ellas serán co- 
MO sean— pero de eso a prepararnos semejante infa- 
Mia va un abismo. Siempre nos han tratado con mu- 
Cha amabilidad. 
—i¡SÍ, sí! ¡Hipocritonas que son y unas tirás con me- 
NOS vergúenza que mojama dan por una perra gorda...! 
Si ya ne barruntaba yo que nos harían una judiá de las 
de aupa... Dende que nos metimos a Coser, están. que 
Muerden hierro... ¿No Pacuerdas de las primeras noches 
Cuando yo les cánté las cuarenta y les alvertí que no 
Me petaba ir con ellas de bureo? 
—8SÍ... parecían diseustadas... pero después se con- 
lor Maron; y ya no han vuelto a dar la menor señal 
de molestia. 
— ¡Eres más panoli que'un abejorro! ¡Paece men- 
tira Que tengas más talento que don Ramón y Cajal y 
MU 2uipes lo que tiés delante de las narices! ¿Entovia 
as dao cuenta. de qwellas fueron las qw'oreaniza- 
  
 
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.