VIDA MONTEVIDEANA
quier reinando con Ia soberania de su con
junto espléndido !
En la verdad que comprende su belleza,
no hay un voto discorde; unos la llaman
mujer soñada; otros, encantadora; otros,
perfecta, y otros, única.
Con entusiasmo la proclaman reina: un
médico joven, de largo apellido, un doctor
tan buen mozo, que una niña bellísima le
llama « el hombre espléndido)), así lo es en
verdad, pues nunca esgrimirá más recta
mente la vara de la justicia que en el caso
presente ; un joven abogado que desempeña
el puesto de Agente Fiscal en un departa
mento y que actualmente está aquí de paseo;
un joven que tiéhe pasión por Colón, y tan
tos otros, que seria-largo enumerar.
Para formar el marco á mi Transparente,
diré que tiene un nombre corto y bello, cu
ya fiesta santa figura en este mes; nombre
que significa ciencia y nombra á una ciudad;
que su apellido tiene sonante significado;
que vive en una calle que tiene por nombre
el recuerdo de una de nuestras glorias, en la
cuadra, en que luce su magnificencia un
palacio recientemente construido.
LATISTE
M existencia es un punto.acibarado ;
,Si á mis quejas pusieras oido atento,
■Tú lo habrías de oír cd’fbo un'trinado
O como una blasfemia al firmamento.
Si me vieras alegre y sonriente,
No te preocupe, santa, esa alegría,
En ella hay setas de amargor hiriente
Y hay extertores de intima agonía.
No me preguntes porque mi semblante
Tiene de monje austera seriedad,
Es .mi existencia un rugido excitante
De excepticismo en plena mocedad.
Pasan las horas; veo en lontananza
Que el, siniestro fantasma del pasado
Ya regresa; y mi cielo de esperanza
Hállase triste, negro, encapotado.
Hiela mi alma tu amarga indiferencia
¿Para qué ser cruel siendo tan bella?
¡Al menos deja, sobre mí suspensas,
Las claridades de tu luz de estrella!
Sí para transformar a mi existencia
Bastaba apenas, santa criatura,
Que derramases sobre mi alma, esencia,
Si, esencia, de bondad v de ternura!
grimas; entonces ya la vida no trae para
nosotros la perspectiva de una senda sem
brada de violetas y pensamientos por do
quier, sino un piéalgo confusamente agitado,
cuyas olas provocadas por la vehemencia del
huracán, surgen rugiendo á desafiar las
nubes.
¡ Ah del que vive dudando! Sueños qui
méricos invaden su alma, su pensamiento
oscila en un espacio sin limites ignorando el
punto á que dirigirse, se forja una felici
dad, cifra miles de venturas imposibles de
palparlas, y desesperado de la suerte infor
tunada que le depara el porvenir, lanza una
maldición al esplendente sol que desde el
celeste imperio le retempla con sus ardientes
deseos, á la naturaleza que prodígale ofrece
sus dones,, á la vida que ayer le parecia tan
risueña y que hoy se le retrata bajo el fú
nebre y melancólico aspecto de un inmenso
sepulcro. ¡ Pobre, desgraciado del que lleve
en su corazón el roedor gusano de la duda!
La misma dicha agena le arranca suspiros de
desesperación y lágrimas de dolor. Para él
las flores no tienen perfumes, ni la vida ilu
siones, ni la naturaleza encantos, ni el cora
zón esperanza!
Venancio PAIVA.
Internato Normal do Varones,
Montevideo, Setiembre 10 de 1897.
IDKJhprc SOÑAK
Á AGUSTIN SOLLA ( LwkflYO )
\s un cariño que .escondo
En lo más hondo del alma,
Adonde llegar no pueden
Tus atrevidas miradas.
¿ Qué desde cuando lo siento ?
No recuerdo la hora esacta. . .
Fué en una noche de estío.
Noche hermosa, tibia y clara,
Cuando cruzaste á mi paso
Vapórbsa como un hada,
Más hermosa que un ensueño,
Cual amorosa esperanza. . .
¿ Qué este amor causará celos
A otra mujer adorada ?
¡ Qué locura ! Si en mi pecho
Reinas tú, cual soberana !
¿ Qué en el alma reina solo
La imagen de la que se ama ?. . .
La concurrencia,'que en su mayoría erl
compuesta de profesores y dilellantes, pro!
nuncio en la noche del lunes su fallo favo!
rabie á la joven pianista, y, aunque alguno!
creyeron encontrarle cierta desigualdad el
la ejecución, todos, sin embargo, opinarol
en que la señorita Miró tiene ya alcances d|
verdadera concertista é hicieron pronóstico
de que dentro de poco llegará á figurar el
primera fila entre los que cultivan el arte d|
Mozart.
Las dificilísimas y numerosas obras qul
tenia á su ca,rgo en el programa, fuero!
ejecutadas por la distinguida pianista coj
brillantez y mecanismo limpio y seguro
revelándose á la vez artista de sentimiento!
Fué muy aplaudida en todas esas obras
especialmente en el Minueito de Espino, qu<|
es una joya musical, y en la Rapsodia di
Listz N.° i2, que le valió una franca ovaciód
y obsequios de espléndidos ramos de flores!
lomaron parte también en esa fiesta, loa
jóvenes Avelino Baños y Ambrosio Brandal
en el trio de Godard, ejecutando también el
primero una hermosa romanza de Mendelj
ssohn para violoncello que fué interpretada
con exquisito gusto.
La señorita Maria Miró se hará oir nued
vamente de nuestro público es un concierte
que debe verificarse brevementeen el Tea'n]
Solis con el concurso de diversos artistas.
El viernes próximo tendrá lugar el con-]
cierto privado que en obsequio de sus asoj
ciados dará la Sociedad Reethoven. A juzga]
por los preparativos, por los ensayos de la
orquesta, y por los artistas de valimento qud
en él tomarán parte, no es’ aventurado ascj
,gurar que dicho concierto será todo un
acontecimiento musical. En oportunidad|
nos ocuparemos del éxito de la fiesta.
, *
% *
En «La Lira)) se celebrará en estos día^
un gran concierto á beneficio de esta acre
ditada institución musical. En el tomarán!
parte, los señores De Lucia, la Guerrini, Di
Berlendí, Scotti, la Maté, Gaos, la Monte-J
negro, y la orquesta de la Reethoven.
Con estos elementos y otros valiocisimosl
que no se conocen, no dudamos que este!
concierto será el acontecimiento musical del|
del año.. En nuestra próxima crónica hareil
mos conocer el resultado de tan espléndida!
velada.
Dilettante.
C« x-rite
r
colorcheckerEEIS
Notas
En las \ ¿Jalifas del señor Santiago Maciel qu e |
publicamos en el número anterior se ha deslizacR|
un error en la estrofa :
Toáosme preguntan
vidalita
porque yo no rio ;
no da el cielo flores
vidalita
cuando viene el frió. .
pues la palabra subrayada cielo está equivocada;]
debe deciy seibo. Queda, salvado el error.
Hemos recibido por correo un crecido número]
de poesias V trabajos-literarios suscrito;.cou pseii'l
dónimos: Cama no conocemos á quienes pertene
cen, pues- vienen sin finí)a, los hemos suspendido!
hasta tanto los.autores tengan la bondad de h*'|
cerse conocer en esta Redacción, prometiéndote 5 !
reservar sus firmas, si asi lo desean, cuando s e |
publiquen sus trabajos.
Por exceso de material hemos tenido que sus
penderá última hora la biogrofia que debía acoiii'l
pañar al retrato del distinguido batitono nacional*!
señoi Carlos M. Echeverría y las crónicas de lo s |
teatros " San Felipe » y « Stella d’ Italia a>.
Esliblucinúcnlo gi-áilco á vapor. Co ivencion 82.