Full text: Tomo 2 (002)

  
o 1 : = 
CAPITULO LX 
El colmo de la medida. 
El ruido hecho por la silla de posta al desembo- 
car en la calle, llamó la atención de Georgina, la 
que, asomándose al balcón, vió con asombro que 
aquel carruaje era el de David. | | 
Sintió que su pecho se inundaba de júbilo, y una 
sonrisa de placer se dibujó en sus labios. | 
—¡Ya es mía Isabel! —balbuceó, á la vez que se 
retiraba al gabinete. 
Veremos si ahora que soy dueña de esa mucha- 
cha se atreve Rivera á despreciarme. 
Los ojos de la prada: se iluminaron. de una 
manera extraña. 
Odio, impaciencia, crueldad, todo aparecía en 
su mirada. 
—Esta vez David debe haber cumplido mi en- 
cargo de un modo perfecto. 
Le conozco bien, y sé que le sobra. ingenio y tra= 
 
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.