462 LOS MÁRTIR:S ESPAÑOLES
.El momento era oportuno.
- Dió sus Grdonos, que se corrieron con el mayor
silencio, y media hora después, el estampido del
cañón LO por las cuencas de los ríos y las
cañadas formadas por los cerros,
NS
E,
ispartero en persona se lanzó el primero al
puente... ] '
Muy cerca de él iba el Aventurero, que, olvidán-
dose de su origen irlandés, gritó: ;
-—¡Luchama por Espartero! ¡Viva Espartero!
| ¡Vi iva la libertad!
Tal sangre fría disfrutaba Espartero, que al oir
aquellas aclamaciones expresadas en correcto Cas-
tellano, dijo:
— Gracias, señor irlandés; buen chasco me ha-
béis dado. |
--Mi general...
—¡Adelante! ¡Viva la libertad!
La acometida fué espantosa por lo rápida y ta
sangrienta; pero al despuntar el alba, pudo cesar
la zozobra de los bilbaínos, pues distinguieron la
bandera española en los puntos ocupados antes
por las fuerzas carlistas, |
Que aquellas formidables posiciones, que pare- 4
cían inexpugnables, todas estaban en poder del li-
bertador y de sus tropas. |
La entrada de Espartero en Bilbao fué uno de
los acontecimientos más grandes dr registra la
historia.
Y no sólo fué en Bilbao, sino en España enteras