EL PAN OE Los POBRES
OS chicos, y sobre
dos e impresionables; pero yo no les
Im : ; >
sa nada, no, señor, sienpre que Us ted
entregue dicz millones.
<—Juan, y : :
Dr veo con profunda pena que Se
2 teta usted arruinar a mi hija, y me
E confirma más el fijarse usted en una
putada que es toda mi tortuna.
Soy franco; sé que usted posee
tinte, pediría veinte.
—Pues bien: yo me pleno a, darlos. Pri.
mi Es en la
Mero la des
Seria,
¿Lo 1!
AS
—¿Y para qué le servirían a la señorita
Otilde los quinientos mil duros, si S su
'e moría en un cadalso y la justicia
shonra que ver
19: pá insado usted l bien?
* apoderaba de unos bienes. que no pe
énecen?
3 ero, ¿sería usted. copaz! ?...—pregun-
lamen papi eariabd 508 pu Uno: con ra-
e todo.
a deje pisotear impunemente.
ES AEnORanAS de un po 3
| Singotenie lo condz-
pelo a la generosidad
puta «liga a Oi ña,
todo un poco exage-
diez
Mismás, y los quiero. Si tuviera. usted
Bern:
tendré:
tener consideración a
00 siguiendo 1 la
no sólo quieres arruinarme,
: E - complaces en insultarme. ]
Do Juan; aun n 0 dÓr tan vie
momento La ad resolve
conde de
] Pués, ha
Imedio duro sobre la.
“de usted. Si.
que guardará el secreto, si me
Apt sn
caja el dinero para un caso 6d pálr
-—No sería usted el primero.
Eso es un robo.
Será lo que usted quiera.
«YO nO puedo aceptar.
-—Entonces demos por col acluida esta
entrevista, que se va haciendo larga.
—¡Pero, Dios mío, este hombre se ha
propuesto que yo me pieráal
Esta exclamación hizo sonreir a Juan,
cuya tenacidad y dureza; abrumaba las”
timosamente al banquero.
-—Lo que yo me propuesto, señor don.
ardo, es tener qdo 8 millones, y los
-——¿Es esa su a resolt ruclón?—pre Je
“guntó Alame n con tembioreso acento.
iO última—contestó Juan,
Y bajando la voz, contiguó: 19%
-—A los hombres como tú no se les debe
alguna.
Veo, miserable—repuso don Bernar- a
a misma enmonación—, que E
sino que te
- Puesto que tan bien me ha 0
usted, creo que hemos terf ninado.
«—Sí, hemos terminado, porque en es!
en casa del
to arrojando
mesa, Creo que me »
Ne eat bres copas de Ginebra; guá ar- e
«—¡Mozo!—gritó
¿ as don Berbar- :
ó un 'aeguala: inmé-.
AUBRO. se salió qee ¿caño
; murmurand