LA BANDERA ROJA
blación empezaron las obras, y en el espacio de dos meses
que hacía que habían salido los expedicionarios para Pa-
-namá, estaba ya desconocida aquella primera pertenencia.
- de Cesar y sus compañeros. dd | a
- Los barcos de cabotaje que del Callao partían para
- realizar su comercio con toda la costa, tocaron en la en-
- senada, y las gentes que los tripulaban quedaron sorpren-
didas de aquella transformación. a A
Y, como es consiguiente, al llegar al Callao dieron,
noticias de lo que habían visto, y de las nuevas fortifica-
- ciones que por aquella parte se estaban haciendo. ...
- Desde el Callao á Líma no tardaron en llegar, y un
día uno de los oficiales del virrey dijo al secretario: ]
-———Parece que los ladrones de Arica ya no se contentan.
con lo que tienen, señor secretario. . | E rana
o —¿Por qué lo decis, señor Crarcés?—le preguntó
A o ESE
-—— —Nosé6 si sorá verdad; pero mi bijo, que ha llegado
del Callao esta mañana, dice que, según el capitán de la |
.
galera Gaviota, que va recorriendo las costa para hacer sus
ventas Ó compras, la ensenada de Coch amba está desco -
A O E Oe ds
-. —¡La ensenada de Cochamba!...—exclamó el secreta-
e rio.—¿Dónde OOLA-DROr 0 E
Familias de ladrones, por supuesto.
ESA y %
—Á unas cuantas millas más allá de Árica. O
-—¡Ah! Vamos. Donde primeramente se habían esta:
blecida esos tanos. PAS O
-—— —Eso es. Pues, según el patrón de la Gaviota, están
-— fortificándola lo mismo que Arica, y ya hay gran número
de familias establecidas allí. .....,. O:
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Hay muchos indios que han bajado de las reservas 6
E A A
Pues no tendremos más remedio que echarles.
Lo malo es que no tenemos barcos, y ellos tienen e
Cochamba uno ó dos y otros tantos en Arica.
Si no fueran más que e808.. 2.2 00
-—Es que los demás parece que han 1
_—¡Desdichado el punto donde vay
rque lo dejarán arrasado!
"Lo malo es que sé Jos 1