ARTURO CONAN-DOYLE 15
pista una nueva capa de nieve que borra
las huellas, y hay que hacer trabajo de
barrendero para volverlas á encontrar... Da-
me mi pipa, Harry; ya sabes que mis
ideas son más claras cuando contemplo el
humo que sale de ella es espirales azula-
das. Gracias. Ya está. Y ahora, dime: ¿Qué
piensas tú de ese asunto?
—Mr. Sherlock Holmes, me parece que
tengo una pista.
—¡Ah! ¿Te parece? Bueno; pues voy 4
decirte lo que piensas. Tú estás convenci-
do de que el autor del crimen es mistres
- Arabella Aberdeen; crees que es ella quien
ha hecho desaparecer á su hijastra. -
—¿ Cómo pues usted adivinar hasta los
pensamientos más íntimos ? | V
- —Porque mo los guardas tan en secreto
como te figuras. Siempre te he dicho, y
te lo repito ahora: tu boca es discreta, pero
tus ojos hablan demasiado. Hay que con-
tenerlos. Ahora, para convencerte, voy á
descubrir tus pensamientos:
“vicción de que mistres Arabella está ena-
morada de lord Rochester, y que el asun-
to en que intervenimos es una consecuen-
cia dela más vúlgar y la más peligrosa e
as pasiones humanas: los celos.
—Exactamente; eso es lo que pienso.
—Vas demasiado deprisa—continuó Hol-
_mes apretando su pipa entre los dientes—.
4
Concedes excesiva importancia á á
mistres Aberdeen ás lord Rochester cuan-
do abandonó el banco de los. testigos y
pasó á su lado. Confieso que “era una mira-
$ llena de odio, pero esa mujer es inocen-
PE también la observaste, y yo vi en
us labios una sonrisa de triunfo, como si
pensaras : «¡ Ya tenemos la pistal»
Bd por qué no ha ee estar mezclada
ella en el asunto?
¿ —Iríamos muy lejos si quisiera explicarte '
que, á pesar de todo, mistres Aberdeen no
ede haber. cometido el crimen, y mo te-
mos tiempo que: perder. Voy á encargarte
le una gestión, y no muy agradable. Es
ciso que veas esta misma noche á todos
dueños de traperías Y tiendas de ropas
Usadas de la City, y que averigies. si ab
guien. vendió el 7 de Mayo un traje y futen-
os. de ,deshollinador. A las. once - debe
tienes la con-.
-CONsigo: :
manopla Ó llave inglesa, un cronómetro,
un. cuadernito y un lápiz, y- salió de su
una sola
mirada. Yo también advertí cómo miraba.
haber terminado; 'á las doce :me esperarás
junto á la estación de Shadwell, donde está
la taberna del Beefsteack John. Sé puntual.
Hasta luego.
Cuando se marchó Harry, Sherlock Hol-
mes permaneció como un cuarto de hora en
su sillón, fumando la pipa. Luego se incor-
poró: abrió. algunos armarios y revisó su
abundante guardarropa, que le permitía dis- (
frazarse con todos los trajes imaginables. Es-
cogió uno de marinero, pantalón de paño
azul, camiseta de algodón amarillenta: y
blusa escotada. Se puso por
impermeable barnizado de alquitrán, se Cu-
brió con su gorro marinero, con cintas en
que se leía en letras doradas: «H. M. S.—
Canadá», y se desfiguró el rostro con una
barba postiza. Luego, ante el espejo, se
pintó de colorete las mejillas, acentuó sus
cejas con un trozo de lápiz y se dibujá
en el pecho un ancla y las palabras «H. M.
S.—Canadá», imitando maravillosamente un
tatuaje.
Por último, tomó diversos objetos que en
circunstancias análogas llevaba ' siempre
un revólver de seis tiros, una
casa. : e
Quien hubiese encontrado A oe mari-
nero que paseaba poco después con las
piernas un poco zambas y las manos en los
bolsillos, mirando atentamente todo lo que
podía excitar la curiosidad de un navegante,
no hubiera podido reconocer de él á Sher-
lock Holmes. : :
Al pasar por una silo poco concurrida,
subió 4 la imperial de un ómnibus que le.
paseó por las. principales vías de Londres j
durante una hora. Luego, como. sl hubie-
ra llegado á su destino, bajó. del vehículo .
y se internó por una callejuela estrecha, cu-
yas casas 'daban impresión de vejez y de
suciedad; la atravesó y llegó á la estación
de Shadwell, más solitaria y más triste que
munca á aquella hora. Se oía á lo lejos r
do de conversaciones y chocar de vasos
platos y. cuchillos. El ruido procedía de
- una casa de la -Sutton-Street, sobre cu
puerta, alumbrada por un farol verde, ha :
bía en una muestra - dorada este letrer
e AL BEEFSTEACK a a
encima fun