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de die leccione 2 
erdas y add nte S hs 
—Monseñor me favorece demasiado... 
lebo. añadir que su Majestad desea que e 
aslado de ese preso se haga con el raa- 
Or secreto...; por consiguiente, si teneis 
a bondad de permitírmelo, esperaré en la 
estancia contigua a que traigan al preso 
Y me lo entreguen. nO, monseñor, 
en que tendréis la bondad de dar las Ór- 
¡Qénes necesarias... 
Está bien; podéis rein 
tancia que decís; alí os 
entro eee unos 
a, señor | 
- A 
Indamente, 
inmediata a: 
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labozos 
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—Sin ej embargo, 
—Lancelot tiene 
Buridán— E 
.Tán aquí 
buscarlo, . 
narece 
..o.o. 
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"Otra nueva te 
tro' hermano, 
ól... pero 
: le ca 
a mueñas- personas 
PS 
n el mismo instante se abrió Ti 
; Felipe pálido, dercriao 
de pie por no sabemos 
E n logs brazos Y Jas ad ha $ | 
r las cadenas que le había de 
tito : 
Buridán no tavo tiempo más que E 
sujetar a Gualter, que iba a precip tars 
al encuentro de su hermano, y Pi 
cirle en voz baja: 
—;¡Por Dios! ¡No os raováis!... ¿Que 
réis perd derle?... 
Lancelot dió dos pasos hacia A a] 
y cbtan pe ae actitud más digna y $u 
entonació an más ¿utoritaria, ordenó; 
¡que desaf ten “al preso 
En el mismo instante se oyó el son de 
rompeta. anealO lot : Se paró en Seco. 
aca, que foca ye- 
, Apoderémonos 
lipe y 
cabrdo de decir esto, 
ba Gualter al-otro extre- 
recaando a Felipo mue 
-—¡ Herraano!¡ Hermano! ¡Soy yo! ¿Qué 
: Dee ed ¡Habia! Sh 
>lipe volvió hacia 
tro lívido y unos 0308 
, 
su hermano su roga 
S pe expresión. 
mio! — 21 PA en alter—. .. ¡Mi 
gorita! ¡ Marga. 
>». 
—1:103 
nertáÁ 
ermal RO eS 
instante estalló un tumul» 
a parto ALTEA 
y sus corpañeros, en 
en el umbral de la ha- 
ada en la mano, gritar 
¡Matadlos?... ¡Apoderaos 
del de a viene mandar 
Cogedílos VIVOS L... 
per dón!... 
un hombrecillo enciengue, con el ros- 
modo por una alegría ESTO a. 
nie. escondido datrás de 
vOZ er Pra señalando a gq