Full text: Tomo primero (001)

Ls) 
a 
A 
LOS ANGELES DEL ARROYO 
bien tenga ofrecerle para que pueda desahogadamente 
realizar sus aspiraciones de felicidad. 
—Se lo prometo, Nora. Pero en cambio, usted va a 
prometerme otra cosa. 
— ¿Qué? 
—Desistir de esa actitud que hace tiempo adoptó co::- 
tigo y devolverme aquella dulce confianza que manites- 
taba usted al principio. 
—No comprendo—contestó Nora con el rostro encen- 
dido y la respiración alterada. 
—Sea yo, Nora, otra vez para usted, Eduardo, el ami- 
go sincero que la ama como puede amarse a usted; cor: 
todo el respeto que inspira un alma virginal y pura como 
la suya. 
. Nora me tendió la mano diciéndome: 
—Sea... Amigos... Amigos siempre. ¿No es verdad, 
Eduardo? 
Y sus ojos se llenaron de lágrimas y sus labios tem- 
blaron con una sonrisa dolorosa, que contradecía aquellas 
lagrimas que titilaban en sus negras pestañas como gotas 
de rocío en las puntas de las ramas de una palmera. 
Y pasó un año más. 
Nadie, ni yo mismo, hubiera podido sospechar lo que 
existía en el corazón de la virgen bajo aquella apariencia 
Serena, inalterable. 
Nora, naturalmente, dada su edad, ya más avanzada 
Towo 1 39 
A da 
“YN 
a 
A 
me!
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.