LOS ANGELES DEL ARROYO 1421
—Y te ha dicho que es posible que me muera...
—NO..., Pero...
—Sí..., eso te ha dicho, como a mí...
—Sí... que pudiera ser...
—Si no se pusiera remedio.
—+Eso es,
— ¿Y te ha dicho cuál me aconseja?
— OÍ.
— ¿Cuál?
—Que te cases.
—Pues yo voy a obedecerle. He aquí mi mujer—dijo
Enrique, señalando a la doncella.
—;¡Camilal —exclamó doña Eulalia, estupefacta.