Full text: Tomo segundo (002)

LOS ÁNGELES DEL ARROYO 335 
or 
Curiosidad por conocer lo que ha hecho de esa pedrería 
falsa, que voy a hacer telegrafiar a Nig1i-Nougorod para 
que averigú=n si ha ido a ofrecerla a ese ¡israelita usurero, 
y Ordenar a éste que detenga las alhajas falsas en su po- 
der, de orden del Gobierno, como producto de un robo, 
y que detenga al Nemesio y me lo manden aquí. 
—¿Para qué, coronel? 
Para que conozca a lo que sabe el knut ruso, aun- 
que en pequeña dosis. 
—i¡Bah!, no... Déjele usted, que él se buscará su suer- 
Es. 
—¿Piensa usted salir con la Golfini al terminar en el 
teatro Miguel? 
—No, señor; ella, con la duquesa de la Sonora, se irá 
a Madrid, y yo es posible que vaya a Turquía y a Persia, 
TeSabe usted que he recibido aviso de la fuga de una 
Señorita muy conocida con su novio? 
- ¿Sí? ¿Quién es ella? 
TLa debe usted conocer de vista porque iba mucho 
teatro con su prima la condesa de Ulm. 
Ah! ¿Habla usted de Sofía Muriavich'z y de Ludo- 
VICO Lenze: ki? 
—Sí, señor. 
— Oh! Eso lo supe yo desde la noche que se fugaron. 
o hasta ahora no se ha dado parte, porque no se 
Onde están; y su tío, el viejo conde de Tolosoft, y 
U madre están desesperados, creyendo que no van a vol» 
Erles a Ver, y ya el tío transige con la boda de su sobrina. 
TEsos son los resultados de algunar necias oposicio- 
sde ls pacres al casamiento de una hija. Ludovico es 
Ombre digno, aunque no es rico; es de una buena fa- 
al 
] 
de 
| 
3 
| 
] 
e 
et 
A 
e 
Mz
	        
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.