Full text: Tomo segundo (002)

952 LÓS ANGELES DEL ARROYÓ 
—Es probable, porque algo de golfos hay en su historia, 
—Sí; ella se llama María de los Golfos, y se dice que €5 
a consecuencia de haberla tomado bajo su protección una 
cuadrilla de golfos, de esos niños harapientos. 
—Sí; hijos algunos de mujeres que han faltado a sus 
deberes, pero, que no han querido que el hijo adulterino 
usurpe los derechos de los hijos legítimos. 
% 
La palidez habitual de doña Irene se convirtió en den- 
sa lividez, 
Aquella infeliz mujer estaba condenada al eterno supli- 
cio de verse censurada, ya por su marido, ya por sus hi- 
jos, hasta por el propio Arturo, que más de una vez tuvo 
palabras duras para las adúlteras. 
Parecíala que el duque conocía sti secreto y que se lo 
reprochaba indirectamente, 
Y nada tan incierto, porque el secreto no había salido 
aún de entre ella y su hijo César. 
—Pero vamos, papá, Arturo... 
—¿Qué? 
—«¿Dónde vive? 
—No lo saben; pero sí qué clase de vivienda es la suya: 
— ¿Cuál? 
—El hijo del millonario y Grande de España don Alvar0 
Fonseca, duque de Torremolinas, hoy vive... ¡en uNa 
buhardilla!
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.