Y pidió u;
quince
a caña de manzanilla, que
»UL
años se apresuró a servirle,
—¿Qué debo ?—
—Aún no
diré,
Manuel dese:
“ón ojos encondi
Te he di
Waigas no probaré
, Cs
¡NQUIPIO
tuerte pu
A
y MAA AE
os al dependie
nte,
'ho qu 6 quier
42 caña.
—La cuent: bn
—Bien. Extiéndeme un recibo y te 1
da
Perior quiere saber en qué empl
Manrique miró al muchacho £11:
MYLALMTIQuUe IMIPO al muenacho 11/a
ú una sien.
asciende a un rea
Yo tengo que
(
1
ul
—Bien, bien,
“Mva a unos clientes.
Manuel hizo un gesto afirmativó y
Darróquiános y luego, se
Aquí Bede usted el
“ AN JOY
ponia. a escri
Ja 3)
recibo.
sin antes mir ar a Manuel con
llo una estafa a la Hacienda.
11
—No tengo ningún sell
el
O, senor.
YO
rec 11bo.
—Entonces
no quiero
laberna.
LA LEY DEL AMOR
Manuel al e
p E
o la cue
Ahora la tracré el reci
Y elmuchacho tomó el dinero y se
cierto re
—Aquí falta el sello móvil—puntualiz
un
ervirle otra.
) Pé garé al
7 1 La A dl 57 ye
r cuenta de todos Mis gas
celo,
A
que
Manrique, que iba disfrazado de arriero, sentóse'a sú lado
mue
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1
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o su ainero,
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Senor, $
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Aquí ve lo ca1ejo.
se hall:
: Y Manuel dejó el recibo encima. de la me
F- talle seguido de la risa de todos. los
is loco que
1401
hacho de unos
Imnis
mo,
mi su-
OS, Ve Ue
ó un dedo
SD
de:
ere que
oMoO. servia A UDNOS
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o qe 1a mesa, no
A un cometi-
salió a le
¿ban en la
38 y
una espuerta