Full text: [1] (1)

” 
. 
LA LEY DEL AMOR ZO 
A: Y ñ 57 19 y élaro? 
G * £ e e 
«—MNUy aci que “sea, ya que ún don' Alvaro, no iba 
acompañado, 
ATEN o 1 1 A ] . do 1 s 
e. Y cómo no ge nabra decidido an 11P, sabien 1d0 que 1105% 
otros andamos por aquí 
ere a que sea de noche para salir sin riesgo de 
say e IT O All Al e > pS 
ser detenido; pero guarde silencio y sl 
ramos escuchando, se- 
vo ha oído usted una 
hor sargento... ¡Ahora!... Ro ¿N 
ligera tosecilla?. 
«Me parece que sí... Pero ya están aquí los que han ido a 
En efecto, Juan José y los dos guardias acababan de des- 
'se de entre las negruras del subterráneo, 
iS de los guardias encendió un mechero, y Aracil la 
linterna : 
e Toma- HO dijo a 
1 gitano—, Alúmbranos tú, 
Juan José la ó a bailar en su mano. No ol- 
A 
la muerte de Miguelito el de Antequera. 
—No tiembles—le dijo el agente—. No tiembles y ponte de- 
trás de mí. 
resolución cogió la llave y abrió la puerta, lan=* 
a PE 
zandose-. por la es 
Y CON gran 
lera, seguido por el sargento y por los 
guardias, uno de los cuales cogió la linterna a Juan José al 
ver que éste se había arrodillado, 
. 
—¡ Trae aquí, gallina!—dijo, al mismo tiempo que sonaba 
un tiro en la parte superior de la escalera, 
q 11 , 
AA Ad dior « y O edo 
racil se llevó els mo derecha al brazo izquierdo. 
Me ha herido—mu: ¡sitó: —. Pero adelante. 
como un gamo se lanzó trás el ladrón misterioso, 
nicho la lápida y en. aquel momento 
O 
1 Jardin,
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.