Full text: [1] (1)

906 LAURO LAURI 
kilómetros de la casa despachaban un vino que resucitaba a 
un muerto, 
—Iremos a dar un paseíllo hasta la hora en que empiezan a 
'antar lós mochuelos. 
—Muy bien—dijo el doctor, siguiendo al gitano por un ca- l 
pa, 
nino orlado de maleza y tomillares. 
-—¡Qué terreno más duro y más bravío!-—dijo el último, que 
.. 
marchaba con su vara de mimbre en la mano. 
—Muy bravío, sí. 
—Aquí ahora no pasa nada; pero hace años estaba toda esta 
sierra llena de bandidos, que le quitaban a uno hasta el re- 
suello, Por aquí merodearon José María, Juan Palomo y otros 
muchos no tan afamados. 
—Agquellos años pasaron a la historia. Hoy apostaría mil 
pesetas a que no queda un ladrón por aquí, 
—Quizá las perdiera, señor médico. Hoy hay tantos ladrones 
como antes. 
—Le advierto que yo llevo muy poco dinero, y que si nos 
salieran al encuentro sabría defenderme. 
-—No; por aquí no se cometen raterías. El robo que se hace 
es en gran escala 
—¿Se ha cometido alguno en estos últimos años? q 
—Hace cuatro días en Antequera robaron y dejaron medio 
muerto a un señor. 
—¿Qué'me dice? 
—No crea que le miento. Al hombre más rico de Antequera. 
El médico, que no tenía muchos deseos de alejarse de la 
casa, sentóse en una piedra que había junto al tronco de un 
árbol e invitó al esposo de Josita a que lo hiciera a su lado. 
—Mañana iremos a la venta y merendaremos. Charlemos 
aquí. 
ís de encender un cigarro de
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.