LA LEY DEL AMOR 907 
apestoso tabaco le contó con más detalles el suceso de Ante- 
quera. 
—Me lo contó anoche mi cuñado Joselete, Ha sido un suceso 
misterioso. Hay quien dice que ha debido ser un tratante 
de Madrid que llegó a su éasa hace unos días. 
Don. Juan, se estremeció. ¿Y si alguien sospechara de ellos 
y les denunciara? Tal vez el mismo Joselete, 
Quedóse abismado un momento. Quizá Ta Benemérita les 
buscase por los alrededores de Antequera. 
—¿ Y le han robado mucho dinero?-—inquirió don Juan. 
Y 
—No se sabe, pero han debido ser varios millones, porque 
es un hombre muy tacaño y lleva muchos años amontonando 
hasta apolillados. 
billetes, Hay quien dice que los tiene 
—¿Y se habrá llevado todos sus ahorros? ¿No le habrá de- 
jado nada? : 
—¡Quién sabe! Ahora, que como le echen mano los “me- 
llizos” le van a mondar. 
El médico no contestó, y momentos después emprendían 
el regreso a la casa. En la puerta se hallaba mamá Maruja. 
- ¿Y Jogsita?- -Inquirió ésta. 
—¿No se quedó aquí?-—repuso con cierta inquietud el “Mal- 
comio”, 
— Aquí se quedó, pero a los pocos instantes se marchó 4 bus- 
carte para que la llevaras a pasar unos días eon Aurora, 
El “Malcomío” dió una patada en el suelo. y. soltó un taco, 
—¡ Maldito sea un merengue! 
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-¿Qué te pasa, hijo mío? ¿No lo sabías tú 
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