Full text: [2] (2)

| LA LEY DEL AMOR 3117 
—Buscando un antídoto, mamá. ¡Aquí está! 
Y le enseñó un frasquito de cristal, 
—Rosita se ha matado 
por mí, y no quiero que me remuerda 
Y Conciencia. 
Y nuevamente se dirigió a la alcoba de la japonesita, 
—¡Animo! —le dijo— 
“Mi vida no tie 
Mito 
- ¡Animo! ¡No quiero que mueras! 
ne objeto—musitó Rosita—. ¿A quién lo 
Cs4 que yo viva, Manuel mío? 
T¿Que a quién le interesa? ¡A míi!., 
“9% toda mi alma! 
T¿Me lo dices para que sea tranquila mi muerto? 
Te lo digo con el 
. ¡A mí, que tesquiero 
. corazón en la mano. 
Y Manolito le dió a beber el antídot 
TiBebe, vida mía! ¡Bebe ] 
Me a ti! 
o que había cogido, 
a vida, que no quiero a nadie más 
Rosita tomó el vaso: y se lo llevó a los ] 
abios, apurando 
Sta la última gota. En aquell 
os momentos deseaba vivir, 
llevó una mano a la boca del estómago. 
mala me pongo, Manolito! 
Tuvo un momento de intenso malestar y grandes augus- 
lAS y tornóse exageradamente pálida. 
CiAgua muy caliente!... 
lento. 
Mas de pronto se 
SiAy, qué 
¡Traed botellas de agua Muy Ca- 
que se ha quedado fría!-—dijo Manolito. 
Al poco rato ] 
lados y en ] 
ión y 
c ponía las botellas, colocándolas en los cos- 
os pies, Inmediatamente le ad 
la arropó con varias mantas. 
No te muevas 
Yación. 
ministró una inyce- 
y trata de sudar—le dijo—. Esa será tu sal.
	        
© 2007 - | IAI SPK
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.