Full text: [2] (2)

3138 LAURO LAURI 
—¿Y el herido? ¿No ha vuelto aún en sí?—le preguntó a don 
Juan, al ver que éste miraba al chino desde la puerta de SU 
alcoba. 
—No ha vuelto en sí, y quizá no vuelva si no le operamos» 
—¿Se atreverá 1 dl a operarle sin medios para ello? 
——Moe atreveré, he que Dios guíe mi mano. Lo único que 10 
puedo es anestesiarle, 
—Tendrá que atarle bien. Si no lo hace así, quizá le des" 
troce la mano de un mordisco, 
—Le ataremos a las tablas de la cama. Todo, antes que des 
jarle morir sin asistencia, 
Un quejido les interrumpió, El herido volvía en sÍ y nl" 
raba con incoherencia en torno suyo, 
Don Juan acercóse al lecho y posó sus ojos en el chino, 1 al 
mismo tiempo que le cogía una mano, 
—Debía dejarte abandonado como-a un perró que se arroja 
al E a dijo—. Tú no mereces otra cosa por infame 
Jué les he hecho?—+tartamudeó el chino, sin atreverse 4 
mirar de frente al doc tord 
—¿(ue qué nos has hecho? Bien lo sabes, canalla. 
—Después de darles hospitalidad... 
Que te hemos pagado, ladrón, No te debemos nada, y tú 
a mí vas a deberme la vida, porque te voy a arrancar de 198 
varras de la Muerte. 
—¿ Me estoy muriendo? 
¿A . A e A 
—Te estás muriendo, sí. Te estás muriendo, y yo debía de 
jarte morir por habernos querido asesinar mientras dor” 
mÍdmog. 
—No quería matarles, No crean eso de mí. 
ri, Ta ¡8 
dón Júan sonrió con cierta 1róni2 
iste l Lo Lam ¡édi0o de la
	        
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.