3538 LAURO LAURI 
en el suelo, con todas las flores deshojadas 
en torno suyo y 
PE ON 1 , 
——¿Quíi n ha sido el que, « Mi ausencia, ha entrado en pá 
Juién ha sido? ¿No 
lo sabBarnisted a nasa la miiara dan! 
10 sabe usted, O no Mi O quiere declr pol ue le hayan pagado 
cuarto y ha tirad 
su silencio? ¡Si no me lo dice daré parte al empresario!... 
El avisacor, que era un mozo muy alto y distinguido, 8 
e su ausencia ha 
sido el “Niño de Albaicín”; pero yo no sé si habrá sido él 
y AAA Ed 
quien ha tirado al suelo el ramo 
Na hawvr máa lí al] ar A 751 ! 
— No hay más q 1e h ar lo. Milarritos muv sofocada—-+ 
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polo un ombre como él 1Ul 4 tal iZ¿aña:; mas esto no 
1 p i . . 
ha de quedar as L, 2uinque me lo niego d Ahora Mismo le voy, 
a buscar para decitie un la] 
ncendida de furor por el atrevimiento del 
ENTES PASADA £ . 
Nino de A JUATTO Y empezó a buscarle; 
pero, el Joven, como ya había atabado su actuación, debía de 
haberse marchado, y nada le podría decir hasta la noche sl- 
amioant 
guiente, 
De nuevo al ver d 
l ramo se mordió log labios y 
doseJas lagrimas al oír que llamaban 2 
£ 1 ¡Ya! Va j an nm la | Ji y q 
a no de los acomodadores del teatro, eon 
tro ama d f Tod ] | 
OYTO PaMoO (€ LOTA, NO Y LO ISDOBO jue el que le había des- 
he: y rado en el suelo el N ( le Albalecin A dicho ramo 
acompañaba una tarjeta, en la que:posó sus ojos la bella Mi- 
:] sintió tal.coraie que tirá 
] SiN UIÓ Ll que tiró el ramo al suelo y lo 
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/ ZO ] rpresa del acomodador que 
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vwinal )-18 DO min: ) 88 reunió con Manuel