2132 LAURO,LAURI
—¿Y tu hija? ¿Sabe tu hija que ha muerto su madres
- El hizo un signo afirmativo.
—Mi hija llegó cuando su madre aún no habia sido, ente-
rrada,
—¿Y está en la quinta?
—Allí estás
—Anda—le dijo Rosina—, máichato y pasa la noche al lado
de tu hija.
—¿Accedes a ello sin tomarlo a mal?
—Accedo. Tu hija y yo tenemos que ser puenas amigas,
“¡Qué inocente!—meditó don Alvaro—. Mi hija te abo-
rreco, y huncga ge acercará a ti.” p
Y murmurando. esto salió del Hotel;de la Marina y se
dirigió a su casa para dar un abrazo a su bija. :