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no ( 2nelosza en le casa Ya 1a 1] Js dí JMU- 
Na! Y idos de los noligazanes aurmient , 
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] hi on trascurriendo, y al filo de las tres llegó 
on Juan con aon ) naa, a ta que aejo ence 'ada en el 
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$ rTraneo. Mo t renus en decir cómo salio dae €l fa 0es- 
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dichada , al] de Rafael, el- cual 
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16 | igual! ¿Quién me trae 
a bostezar ruidosamente y a mirar, por todos 
la habitación. 
chera, ma adre m a A 
Cocina donde est 
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io'tardaron en despertar la Pepa y los muchachos, los 
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vudios Se 1anizaron nanmol Nntos sobre el arroz que les habla 
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SODTado ¿a noche anterior. 
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—i¡No lenes tanto la cuchara! -¡Ese pedazo de carne eta 
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CC Mio!l—vociteraban 1038 muehachos. 
Puvo que intervenir Rafael, y la 
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. =¡112a1a, a DUscar gallinas ota vez: 
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“Uñis Largas”. 
Y después de ver cómo salían todos sentóse en la puerta 
E de la calle, 
ms Y pensar que Mária Luisa podía hacer algo por nos- 
Otros y no hace nada! ¡Qué suerté más perra la mía!” 
Después de beber, otro trago de agua echóse a dormir 
a siesta, >" 
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s de las cáico serían cuando le despertó la Pepa, 
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