LA LEY DEL AMOR 2803
taba tan bien hecha que hubiera engañado hasta al mismo
4
Adrián Topete,
—Marilina—dijo de pronto don José Molinero—, ¿me has
teconocido ?
—Ri—repuso—. Mas no sé cómo se-ha atrevido a regresar,
Márchese antes de que vuelva Adrián.
—No—repuso con un acento muy sereno el “Misterioso—,
No me marcharé hasta que la deje en su última morada.
—¿Y si Manrique y Adrián asisten ul entierro?
-—Me tomarán por uno de lo empleados de la fune varia,
ináxime que subiré a la exrroza fúnebre cuando ésta ens
Prenda la marcha.
—¿ Lo sabe Manuel?
-—No quiero que se entere, Tú no le digas nada.
le una muesa un paquete
Y entrando en el despacho sacó «
de regular tamaño. .
“Aquí no está bien—murmuró—, Tengo que sacarlo antes
de que amanezca.”
Al paquete unió dos sobres llenos de billetes del Banco, al-
gunas joyas y varios documentos, :
No tardó en salir a la calle, dejando nuevamente sola a
Marilina.
“pe ha marchado sin decirme nada”, tartamudeó.
El terror volvió a. apoderarse de su espiritu, y llamó a las
doncellas, las cuales no tardaron en acudir,
Al saber que tenían que estar con la difunta hicieron un
ES8tO ( le ( lisgus LO.
RAR