modo su alegría y su cariño filial.
“ Magdalena no desmintió a su hijo ni pronunció palabrh
mi de momento mediaron tnás explicaciones. *
El anciano volvió a sonreir, satisfecho de haber aces
Ma con los ojos muy abiertos, repitiendo en el colmo de p
estupefacción +" - : is
2 Su madre ! e A
Hubo una larga pausa. e
Todos hallábanse profundamente conmovidos.
El tío.Pablo fué el primero en romper el silencio,
. ciendo a Andrés: 7
+ —Ya sabes, hijo mío, cuánto te quiero; casi tanto co
Ditavose un instante para respi rar, y prosiguió Juez
.—Mi deseo hubiera sido” que permanecieses a nuestiW
: lado, desde que murió en el hospital el señor Pedro, tu p%
“dre adoptivo y mi amo, que en gloria esté, Aquí, ya-que MW
aceptar mis ofrecimientos, y yo 1 respetó tu voluntad. Exad
,up hombre deben respetarse sie -mpre. Con aspiraciones qué
Otros, y ansiabas encontrar trabajo.. Esto es muy noble Y
El trabajo! Yo consagré a él mi vida, para venir a sef
2 la postre, tuna de sus víctimas. No me quejo, sin embar*
Muestros días en la miseria.
1: Y la abrazó con ternura, como para demostrar de aqu
tado en sus sospechas, y Angel miró a Andrés y Magdalé'
“mc a mi nieto Ángel, -con lo cual está dicho todo, Y lo 14
reces. ¡Eres tan bueno comio él! * : |
«bienestar, habrías encontrado « cariño; pero tá no quisistfl .
libre e independiente, y la libertad y la independencia de
RO, censuro, te avenías mal a vivir de la caridad como 108
muy justo,. aunque te. proporcionará muchos desengaño ]
: Bo; es lo-que nos sucede a casi todos los que del trabajó
vivimos ; trabajamtos para vivir. y “vivimos para cab ?
q.