98 ARTURO CONAN-=DOYLÉ 
Small, luego él es el hombre de la pata de palo. ¿No 
“ve usted en todo ello una lógica convincente?.... 
—Sií, señor; tiene usted razón. 
—Bueno, pues ahora pongámonos en el lugar de 
Jonathan Small. Este individuo viene á Inglater 
con un doble fin: reivindicar su derecho y venga! 
del hombre que le engañó. Descubre el paradero dl 
Sholto, porque uno de los de la casa le sirve 
cómplice y ese cómplice es ese jefe de comed0 
Lal Road de quien nos hablaba, y bastante mal po 
cierto, la vieja Bernstone. Small no es posible qué 
descubra el lugar en donde está escondido el teso% 
de otra manera que valiéndose de algunos de lo 
criados, pero no del fiel mayordomo de la casa qU 
moriría antes que descubrir el secreto. Cae enfer 
mo este hombre y Small se entera de que está d 
gravedad; aterrado ante la idea de que muriera lle 
vándose el secreto, Small, jugando el todo por el 
todo, llega hasta la ventana y trata de entrar en: 
cuarto, pero se lo impide la presencia de los dos hij' 
que cuidan al padre. Ciego ya, se decide, y aqu 
misma noche entra en el cuarto, revuelve todos lo 
papeles con la esperanza de encontrar algún doc 
mento que le indique donde está lo quebusca, y fin 
mente deja la tarjeta en la forma que la encontram 
sobre el cadáver. Indudablemente se había jur 
que, de matar al mayordomo, le mataria tomand!| 
tudo género de precauciones y creyendo lleva! 
cabo un acto muy grande de justicia para la cau: 
de los cuatro. Tales creencias son frecuentísim 
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