300 PARTE XIV. - DE LAS COSAS SAGRADAS 
empieze la fábrica antes de que el mismo Obispo ú otro 
por él delegado, inspeccione el lugar y lo apruebe, fije 
allí la cruz y bendiga la primera piedra. En todas las 
erecciones de nuevas iglesias, ermitas, capillas ú ora- 
torios públicos, garantícese por medio de público 
documento la-perpetua dedicación de dichas iglesias y 
oratorios al público culto católico, así como la perpetua 
dependencia de los mismos sagrados edificios de los 
respectivos Ordinarios, no menos que el libre acceso 
de los sacerdotes aprobados por el Ordinario y de 
todos los fieles á los tales templos ú oratorios públicos, 
según las normas que cada Obispo prescriba. 
746. Ante todo, en la construcción de una nueva 
iglesia, escójase un lugar aptísimo y conveniente para 
los sagrados edificios. Por lo cual, para que se observe 
la tradición eclesiástica, fabríquense. en cuanto sea 
posible los templos en sitio abierto y prominente, en 
memoria de Jesucristo, que para ofrecer el cruento 
sacrificio subió al monte Calvario, y para significar 
también la ciudad santa situada sobre un monte, esto 
es, la Iglesia de Dios. Si esto no se pudiere, elévense 
á lo menos de tal modo sobre el nivel del suelo que 
haya de llegarse á pisar su pavimento subiendo cierto 
número, por lo común impar, de gradas. Estén las 
nuevas iglesias por completo separadas de las mansio- 
nes profanas, principalmente de las sórdidas, y si junto 
á la misma iglesia ha de haber alguna casa, cuídese de 
que no impida la vista, la belleza y la tranquilidad 
de la casa de Dios. ] 
147. El plano debe trazarse según las formas re- 
cibidas por la Iglesia, y antes de que se ponga en 
ejecución ha de ser examinado y aprobado por el Obispo. 
Es recomendable que las nuevas iglesias, en cuanto lo 
permita la situación del terreno y cual conviene á la 
naturaleza del sagrado edificio, ofrezcan, según la anti- 
«quísima tradición de la Iglesia, la forma de cruz, en 
memoria de la crucifixión del Salvador; conviene ade- 
más que, si á ello no se opone el terreno, el altar mayor 
con el presbiterio mire hacia el oriente, y que la puerta 
- principal se construya en la parte occidental del templo