NUPCIAL
TI
INTERROGACIONES
El niño fué bautizado con el nombre de
Carlos, e instalado en la pieza contigua a
la de su abuela.
Al principio Andrés lo, vió con hostilidad,
casi con disgusto. Pero la santa señora fué
disipando con sanos consejos y con Ccari-
ñosas amonestaciones las negras nubeci-
llas que se cernían sobre la cabecita del
Inocente. Por otra parte, en cuanto el niño
fué creciendo, se volvió tan cariñoso, decía
' tan dulces palabras con su adorable media
lengua, que acabó por ganarse aquel cora-
- zón. Crecía sin darse cuenta de su verdade-
ra situación en aquella casa. Llamaba papá
a Andrés y mamá a Angelita. Se sentía
dueño de todas las' voluntades, y mandaba
con un garbo “adorable de on
El cariño que se le. dispensó -en aquella
E casa, fué el cariño abnegado y vigilante
que se le dispensaba a un hijo. Se cuidó
+ de su educación, tanto como de sus trajes
y de sus juegos. No fué tratado, combo
otros niños en semejantes circunstancias,
con humillaciones y altanerías, haciendo
caer sobre sus cabecitas, sagradas e inocen-
tes, la culpa de sus padres. No se le echó
he jamás en cara su ¡UBA como. e hacen e