16 LA GUERRA DE LOS 15 AÑOS
Todo esto y mucho mas han olvidado los que, como
los Sres. Torrente y Garcia Camba, escribieron guiados de
un espíritu ciegamente español y monarquista; y si lo re-
cordamos, es solo para restablecer los hechos y fijar la ver-
dad histórica, y no para despertar viejos rencores, porque
no queremos ni debemos hacer refluir el ódio que nos ins-
piran los abominables nombres de Valverde, Boves, Calleja,
CFoyeneche, Imaz, Morillo y otros tantos representantes del
despotismo colonial, sobre la nueva jeneracion española, a
la que por muchos títulos amamos.
Esto dicho en honor de la revolucion de América y
en resguardo de nuestra imparcialidad como historiadores,
entraremos en materia,
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nas de Potosf: segun dicha conscripcion, cada año debia marchar a Potosí la
séptima parte de los indios orijinarios de cada comunidad.
Los correjidores abusaron tanto en su ejecucion, que llegó ¿poca en
que, en vez de la séptima parte, se envió la etarta parte de cada comuni-
dad.
De estos mitayos [que asi se llamaban], la tercera parte, por lo menos,
moria en las minas, cuyas duras labores no podia resistir, i el resto volvian
mendigando por los caminos, cuando no enfermos para morir en sus casas 1!!!