vaa,
|, Y lo has visto ?
SÍ,
»—¿En dónde y cuándo?
-—Hace dos días, en el teatro Covent Garden,
Lo hice seguir por uno de mis marineros, pero
éste perdió la pista.
Entonces le ofrecí una buena recompensa si vol-
vía 4 encontrar aquel gentleman.
—¿ Y lo volvió 4 encontrar?
—El fué, precisamente, el que me dijo que Ava:
tar se hospedaba en el hotel Bristol.
-—Está bien, —dijo Tippo Runo cuya frente esta-
ba bañada en sudor.—Pero ¿tú crees que la poli-
cía dará cródito á tus palabras?
—Iré al almirantazgo y presentaré las pruebas
de acusación.
—¿ Y después?
—Después, el hombre que le siguió les indicará
donde se hospeda.
—Perfectamente, —dijo Tippo Runo frotándose su
gudorosa frente, —pero yo hubiera preferido que
este maldito hombre se ahogara.
-Mas cuando lo fusilarán será lo mismo.
Cuando hablaba así John Happer, un suspiro se
escapó de los labios entreabiertos de la Hermosa
Jardinera.
—¡Silencio!-—dijo Tippo Runo.
Rumia abrió los ojos, y fingió tan gran asom-
bro al ver á los dos hombres reunidos, que estos
no dudaron un momento que dormía,