Full text: El único tigre

Con gusto vió que en el salón de lectura no había un alma 
y cogiendo los más recientes periódicos y revistas de sociedad, 
56 preparó para hacer un detenido estudio de ellos. La experien- 
cia le había enseñado que era la mejor forma de prepararse, 
un preliminar necesario, para ir a hacer una visita a lady Ariad- 
na Ferne, porque estaba seguro de que durante su ausencia, 
la lindísima criatura no había dejado de hacer alguna excentri- 
cidad de las suyas, alguna cosa sorprente, pero siempre correc- 
ta y que los periódicos se ocuparían de ella, y así fué, en efec” 
to; pronto se convenció de ello, pues una de las más elegantes 
revistas londinenses traía dos noticias sobre la dama de moda. 
La primera le llenó de asombro; la segunda hizo que para él. 
se nublara el sol en aquel hermoso día de marzo. Una de ellas 
venía en la seción de teatros y decía: 
“Vamos a dar a nuestros lectores una noticia sensacional. 
“Sonia, la bruja”, opereta de Gualterio Rosen, que durante dos 
años consecutivos se ha venido representando en el “Volksthea- 
ter” de Viena, va a aparecer de nuevo en escena en el teatro 
Rubicón, a fines de junio o a principios de agosto. Del papel 
de Sonia se ha encargado la aristocrática señorita lady Ariadna 
Echó una rápida ojeda sobre otras revistas. y vió que 
todas daban la noticia en los mismos o parecidos términos; la 
noticia era, pues, cierta. La información, por otro lado, no te- 
nía nada de extraño, pues el condado de Browden había weni- 
do muy a menos. La fortuna de los condes había empezado a 
declinar a fines del siglo XVIII y la guerra de 1914 había dado 
el golpe de gracia. 
El actual conde, padre de Ariadna, estaba arruinado, pues 
le quedaban dos palacios en lejanos rincones de la Gran Bre- 
taña, que nadie quería comprar y grandes extensiones de terre» 
no con sus correspondientes granjas, cuyos alquileres no cobraba 
la familia por generosa tradición. La noticia, pues, podía ser 
verdadera. 
—¡Qué muchacha! -—exclamó. ¡Cosas de Ariadna !—-y vol- 
vió a hojear las revistas. 
48
	        
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.