ERARIO IRA
Dejó allí al escribano sin ninguna dificultad. Y,
embarazado de aquellos dos molestos individuos, 1
carreau se dirigió al galope a Meudon, sin ocuparse
de los seis espadachines que debían esperar órdenes en
el atrio de Nuestra Señora.
Voltour y Cháteaubriant no se volverían a ver tan
pronto... y, durante seis meses, hasta su nombre olvi
darían.