Miz
Fa
como si fus
tral, en t
po de la guerra.
Minka co
uas al
: buena fe que «aquellc
"y a AL ar vr Of 7 rw e
al nitegada «ge A
y no sólo no intent
tuve miedo «del exterior», durant
xcursión po
la frontera.
tinuanc d
ra en $
/2,/Samo8, no
ANDEZ
ARIAS
aje; tú había sido solamente la
e Zi, y querías a la niña
madre y permaneciste siempre neu-
llas tristes «maniobras» del tiem-
33 hombres, que
132708, querían salvarme,
echo» a ellos y
rme, sino
e todo él tiem-
r Francia, de-
lo después:
por la niña; uno
le «estaban sa-
Pasamos
por una carre-
1) hombres que ocu-
laron roscar con
e 08 y e pa 4
42, Sin Pic í ¡N1emente
bres que m
traesni
108 que ac
) ni l
Fra,
un hotel, me a
tenía mucho 'mie Pe y que al
nzó a mí, besándone y llorando;
> Lestaron;
a me dijo que «se la
taba sola, por
regunté a
£
1
también de mí». Todas mis pregunte:
el automóvil pasó a Sui-
aquellos hom-
que pertenecían al «con-
Centrale
¡ ) fronter:
indud: volem: nte sobornaz
$», estaban de
2) franceses y
ían y con
prometidos,
ra abandonar
cl suizo. En Zu-
niña solamen-
verme se aba-
egunté por Miz-
la niña por su
habían llevado.
eso se agarra-
omo temiendo que la separaser
23 respecto de