Full text: El libro de los antepasados (1)

56 GASTÓN LEROUX 
Sabes que han robado a Odette y no estás sobre la 
pista... 
—¿Quién te ha dicho que no “estoy sobre la pista?— 
subrayó el repórter, ya impaciente—. ¿Quién te ha dicho 
que no corro tras ella en este cuarto, más velozmente 
que en un auto que devorase el camino? ¡Desgraciado!— 
agregó, aproximándose—, tú corres tras Hubert... por ahí 
te alejas de Odette tanto como pasos das. 
—¡Tú defiendes a Huberti— espetó roncamente Juan—. 
Pues bien; toma, lee... esto he encontrado en casa de 
Hubert, en un cuarto asolado por el drama desarrollado 
esta noche... ¡Lee! Vamos, lee... 
Rouletabille empezó a leer unacarta atrozmente 
arrugada: 
«Señorita: La acogida que se me ha dispensado en casa 
de usted, con desprecio de la palabra empeñada; la actitud 
de su padre y de la suya con relación a mi persona, ¡ay de 
mil, me llenan de indignación. Es preciso que le vea: la es- 
pero esta noche, a las diez, en el jardín, junto a la puerta 
medianera. Si no acude usted, ya no respondo de mí. Su 
desesperado, HuBERT DE LAURIAC.» 
—¿Comprendes ahora?”—exhaló Juan acongojado—, 
Te juro que no es preciso andar a gatas para compren- 
der. Odette recibe la carta, quiere evitar una desgracia. 
Acude al jardín. El miserable la arrastra hasta su casa. 
La infeliz grita. La oye su padre, descuelga la trailla—y
	        
Waiting...

Note to user

Dear user,

In response to current developments in the web technology used by the Goobi viewer, the software no longer supports your browser.

Please use one of the following browsers to display this page correctly.

Thank you.