222 QUIEN NO VIÓ A SEVILLA...
mo Martínez Montañés, cuando en procesión la llevaban
por la ciudad, salía a verla, y, absorto, decía que era im-
posible que él hubiera ejecutado obra tan peregrina?
De sobresaliente mérito artístico son también las imá-
genes que representan a Cristo enclavado en la Cruz y
a los dos Ladrones en los momentos en que a las palabras
de Dimas responde el Señor con esta hermosísima promesa:
«Hoy estarás conmigo en el Paraíso»; el mejor de los pasos
de la Cofradía llamada de Montserrat, obra del mismo Martf-
nez Montañés, y las que componen el segundo de la Herman-
dad del Santísimo Cristo de la Salud y Nuestra Señora en el
Sagrado Misterio de sus Necesidades, de la capilla de la
Carretería, el cual representa el Calvario antes de princi-
piar el Descendimiento. Debidas estas imágenes a Pedro
Roldán, Molner y Cornejo, resalta más su valor por el
mérito de la composición, la habilidad con que están agru-
padas y la riqueza y el buen gusto de las ropas que las
visten.
Dignas de especial mención son también las imágenes
de las cofradías denominadas vulgarmente de la Quinta
Angustia y de San Antonio Abad, esculturas ejecutadas
por Roldán, Martínez Montañés, Cristóbal Ramos y Ber-
nardo Gijón; y las de otras muchas Hermandades, entre
ellas el Cristo de la Expiración, que los trianeros ape-
llidan el Cachorro; la Virgen del Valle, la de La Es-
peranza, la amada de los macarenos, y la de Jesús del
Gran Poder, escultura maravillosa, tenida un tiempo por
de Martínez Montañés y diputada hoy por obra de uno
de los discípulos de este portentoso artista,