Año V 
Lima, 7 de agosto de 1909 
N. 75 
EN NI A NY E NES d, 
REVISTA SEMEN SIUSTREDE 
Sucesora de * PRISMA” 
Premiado con Medalla de Plata en la Exposición internacional de Milán de 1906 
Director: Clemente Palma Editor propietario. M. Moral 
De juevesa jueves 
e 
E yrovamema, en la época en que 
1 las corridas de toros en Lima 
eran amenizadas con mogigangas que 
deleitaban al pueblo, una de estas mo- 
gigangas era la desoltar perros á cier" 
tos toros cuando por sus mañas eran 
de tal cuidado, que los toreros re- 
huían entenderse con él. Esta mo- 
giganga ha tenido un intento: de 
imitación en la política internacional 
sud americana. Chile encontrándose 
incapaz de capear honradamente el 
problema de Tacna y Arica, y mortifi- 
cado por la actitud firme y digna del 
Perú de no dejarse llevar á otro terre- 
no, en la debatida cuestión, que no sea 
el de la honradez y el cumplimiento de 
los pactos, ha aprovechado de una si- 
tuación anormal para soltar el toro á 
los perros, estoes, para intrigar sola- 
padamente 4 fin de que Bolivia y el 
Ecuador acometieran al Perú, infirien- 
doles así grave ofensa y dando muestras 
de mayor desprecio por estas dos na- 
ciones, bajo la capa de una leal a.ñis- 
tad. Felizmente el Ecuador se ha dado 
cuenta del indigno papel que se le re- 
servaba y sus diarios han protestado 
dignamente de este rol de perro de 
presa que le preparaba Chile al Ecua- 
dor, en la mogiganga internacional. 
Indudablemente que el maquiavélico 
plan estuvo bien urdido y quizá, si 10 
hubiera sido descubierto, habría sur- 
tido todo el efecto apetecido, porque 
nadie más hábil que Chile para fingir 
amistad y desinterés, nadie más hábil 
que Chile para hipnotizar á las canci- 
llerías de los países á quienes aparen- 
ta confraternidad y afecto, Chile es un 
tenorio irresistible y adormece con las 
mieles de su galantería 4 las cancille- 
rías que le escuchan. ¡Cuanto ha hecho 
por captarse al Peri: cuantas ofertas, 
cuantas insinuaciones,cuantas'misiones 
de paz y amistad eternas nos haenviado, 
cuanto ha hecho, en vano, por obtener 
de nosotros el anhelado sacrificio de 
nuestros derecho y espectativas sobre 
los territorios del sur. El muy falaz ha 
llegado hasta ofrecernos, á cambio de 
muestra resignación 4. perder las pro- 
vincias de Tacna y Arica, un gordo gi- 
rón de Bolivia, de esa Bolivia á la que 
hoy engríe y acaricia amorosamente, 
de esa Bolivia que, muerta la memoria, 
olvidada de todo sentimiento de digni- 
dad y de respeto de si misma, se pros- 
tituye al que antes de ayer la condenó 
4 no respirar el aire yodado del mar, 
la encerró en sus punas y altiplanicies, 
que la venció casi sin combatir, que la 
desdeñó durante diez años al no consi- 
derarla digna durante ese tiempo de un 
tratado de paz, y queayer no mas casi á 
raíz de la paz que a: fin le otorgó, insi- 
auaba su desmembración y proponía 
su reparto como si se tratara de un te- 
rritorio conquistable de salvajes, como 
si tratara de una región inexplorada y 
res nulkus, 
Es necesario que haya en Bolivia 
una falta absoluta de moralidad políti- 
ca, tina odiosidad enfermiza muy -pro-