— 45 —
Con qué dolor tan sincero
Recuerdo el tiempo pasado
En que, hallándome á tu lado,
Me repetías - «te quiero!»
Pero mi destino fiero
A padecer me condena,
Y aquella dicha serena
En amargar se encapricha,
De recordar esa dicha
Déjame tener la pena.
Sin quejarme de mi suerte,
me canso de decir:
¿Tendré, por fin que morir
Sin que nunca vuelva á verte?
Ró, porque antes de mi muerte
Te he de ver, paloma mía.
Mientras que llegue ese día,
Después de ausencia tan larga,
Sufriré mi pena amarga
Como tuve la alegría.
Antigua Cigárreria “LA PORTEÑA”
San Pablo 1613-Santiago
de NARCISO SALDAÑO
Gran surtido de novelas y artículos de escritorio
Libros y útiles para colegios
Tabacos y cigarrillos por mayor y menor