17 de Noviembre de 1987
N proyecto. de reforma al Có-
l | digo Civil, actualmente a es-
tudio de una Comisión especial
de la Cámara en que fué pre-
sentado, amenaza la existencia de la
¡ey 11.357, de septiembre de 1926, que
reconoce derechos civiles a la mujer.
Tal cosa ocurre en la Argentina,
mientras en países vecinos, Brasil,
Uruguay, las mujeres pueden ya par-
ticipar de la vida política por el re-
:onocimiento de su derecho a votar.
¿Qué argumentos, qué pretextos pue-
den hacerse oír en el Congreso para
fundamentar una reforma que por sí
misma constituye una ofensa para la
mujer argentina?
La ley 11.357 fué aprobada tras te-
sonera lucha cuando resultaba impo-
sible seguir privando hasta de la
posibilidad de administrar sus propios
bienes a quienes como obreras, em-
pleadas, profesionales, artistas y en
todos los aspectos de la vida privada
y colectiva habían demostrado su en-
:ereza, su equilibrio y su inteligencia.
La disminución de sus derechos ci-
viles es hoy un hecho inaceptable, que
afecta por igual a las mujeres de to-
las las clases sociales, material y mo-
ralmente.
Si hacen treinta años hubiera exis-
tido algo de que privar a las mujeres
y se intentara hacerlo, un ambiente
propicio lo hiciera posible; pero des:
pués que el comercio y la industria
han utilizado las fuerzas y la capaci.
dad de la mujer con fines de lucero
cratándola en el trabajo con igual ri.
gor que el hombre, sin que el Parla.
mento interviniera creando leyes que
contemplaran la desigualdad física en-
tre ambos sexos para establecer jor.
nadas de trabajo más breves a vaca-
ciones más prolongadas, por ejemplo.
resulta sorprendente que se quiera Jimi-
tar o negar a esas mismas mujeres
su igualdad civil.
MAYORIA DE EDAD
El solo proyecto de reforma de la
ley 11.357 demuestra absoluta incom-
prensión de la época evolutiva por que
atraviesan las mujeres y la relación
entre ese crecimiento de la personali.
dad femenina y el proceso democráti-
20 del país, hondamente sentido por la
mayoría de la población, aunque cir.
cunstancias del momento político pro-
curen contenerlo,
“A medida que la mujer ha ido
avanzando en su independencia y en
la obtención. de derechos iguales a los
del hombre, se ha comprobado que una
gran cantidad de diferenciaciones que
se creyeron al principio fundamentales,
no eran más que el resultado de ideas
convencionales. Hoy en día, en los paí.
ses más adelantados, ellas realizan
infinidad de funciones que los hom.
bres —y aun las mismas mujeres —
acostumbraban a mirar como un im-
posible, destacándose esto especial.
mente en las ocupaciones profesiona.
les o atléticas y en el diario ejercicio
de muchas actividades independien-
tes.” (Marion Phillips.)
La mujer que gana su vida y con-
tribuye parcial o totalmente al soste-
nimiento de los suyos ha adquirido ya
una noción tan clara de cuál es su
verdadero puesto en la sociedad, que
difícilmente puede volver a confor-
marse con la antigua leyenda de su
eterna minoría de edad que la invali-
da para manejar el dinero producto
Je sú trabajo y el que necesite para
atender a las necesidades de sus hijos
pequeños si los tiene, así como pars
Jedicarse a la ocupación que le parez.
ca, con absoluta libertad.
APORTE CONSTANTE .í.
“En todos los grandes movimientos
nistóricos las mujeres han desempe-
21
Se intenta privar a la mujer
de sus derechos civiles
Por JOSEFINA MARPONS
“La mujer mayor de edad, casada:
Conserva y ejerce la patria potes.
sad de sus hijos de un mutrimonio
anterior.
Sin necesidad. de autorización judi.
cial o marital, puede:
Ejercer profesión, oficio, - empleo,
comercio o industria honestos, admi-
nistrando y disponiendo libremente
del producido de esas ocupaciones:
adquirir con el producto de su profe.
sión, oficio, empleo, comercio o indus.
tria, toda clase de vienes, pudiendo
administrar y disponer de estos bienes
ibremente, Etc,
Formar parte de asociaciones civi
es o comerciales y de sociedades coo-
perativas.
Administrar y disponer a título one.
roso de sus bienes propios y de los
que le correspondan, en caso de se-
paración judicial de bienes de los es-
posos. Etc.
Administrar los bienes pertenecien-
tes a sus hijos de un matrimonio an-
terior, sin que los frutos, naturales o
civiles de los mismos, pertenezcan a la
nueva sociedad conyugal,
(Continúa en la página 29)
lado un papel que no ha parecido
iempre de- primera importancia, juz-
rando por los nombres que la crónica
etiene, pero que ha sido fundamental,
ásico, como la masa de agua que for.
na la corriente y sostiene la ola que
e levanta y encrespa al sol, El cris:
ianismo sacudiendo la sociedad paga-
la; todas las grandes revoluciones que
brieron eras en nuestro pasado, han
xigido la intervención de la mujer y
'0 sólo su consentimiento, sino su sa-
-Tificio” (Alicia Moreau de Justo.)
Los últimos acontecimientos del mun.
lo determinaron la intervención acti
'a de Ja mujer y su acción como pa.
ifistas, cooperativistas, trabajadoras
ntelectuales y manuales es de inne:
able eficacia en el presente y pródigo
le esperanzas para el futuro.
Hacer triunfar una tesis contraria
en el Parlamento argentino puede,
acaso, significar un éxito verbal o el
le un plan preconcebido para dar otro
saso hacia atrás en la contradanza
jue venimos observando; pero la jus:
cia, por desconocida, no dejará de
alentar en los espíritus libres que se
guirán sosteniendo hasta imponerla,
a causa de la mujer.
LEY 11.357
“La mujer mayor de edad (soltera,
divorciada o viuda) tiene capacidad
para ejercer todos los derechos y fun-
siones civiles que las leyes reconocen
al hombre mayor de edad.”
“La madre natural tiene la patria
potestad sobre sus hijos, con la misma
amplitud de derechos y facultades qu:
la legítima, ete.”
r7anes
Taniol es el
tónico comple-
to para su hijo,
a quien lo hará
fuerte y resis-
tente.
La intrépida rapidez
que en sus juegosre:
velan los chicos que
toman Tamniol, es
resultado de la forta.
leza que Taniol
dá a sus músculos
canto!
1
el tónico de los niños
rrasco ”
50
Lo preparó GENIOL.-
Hace bien.
