MUNDO ARGENTINO
Si la Tierra atravesara una
densa nube de polvo cósmico
podría sobrevenir otra edad de
hielo, que haría desaparecer
todas las formas superiores de
ida.
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permanecen envueltas en el mis-
terio que los astrónomos tratan
de descifrar, y abren una angus-
tHiosa interrogante para los habi-
tantes de la Tierra.
Por el profesor
J. GARCIA MENDEZ
L 20 de mayo del presente año,
algo ocurrió a nuestro planeta
vecino Marte, que ha desconcer-
tado enormemente a los astróno.
mos, y que puede ser de suma impor:
tancia para los habitantes de la Tierra.
Una de sus posibilidades es que, si
algún cambio se efectuara en el siste-
ma solar, la Tierra podría convertir.
se en un lugar en que la vida se ha-
ría imposible,
Durante la primer parte del año, el
aire de Marte parece haber estado muy
cargado de polvo. La presencia de con-
tinuas tormentas de tierra o de arena
podrían explicar esto, pero la mayoría
de los astrónomos sostienen que no
existe suficiente aire en Marte como
para permitir fuertes temporales de
esta naturaleza,
Sin embargo, lo inexplicable sucedió
el 20 de mayo. Ese día, repentinamen-
te, desapareció gran parte de la nube
de polvo alrededor de Marte, como si
un poderoso viento la hubiera arras-
trado a remotos lugares. Quedaron, sin
embargo, algunas manchas de niebla
azul, y esa es una de las razones por
las cuales los expertos sabían que es-
taban observando un cambio en el pla-
neta y no eran simplemente engañados
por una ilusión óptica.
Si algún astrónomo estuviera exami-
nando la Tierra desde otro astro, un
fenómeno como este no tendría mayor
interés. Fuertes vientos en regiones se-
¿as pueden acumular grandes cantida-
mentás
4 de M6
Las tormentas de tierra y de arena comunes en ciertas regiones semiáridas
podrían distinguirse fácilmente desde Marte de haber alli un astrónomo
que nos observara.
les de polvo en la atmósfera, pero una
luvia intensa basta para que, en unas
vocas horas, las pequeñas partículas
le tierra se asientan, quedando limpio
J aire. El problema de Marte es muy
“istinto, ya que allí las lluvias se con:
ideran imposibles, debido a la canti-
lad insignificante de vapor de agua
¡ue contiene la atmósfera de aquel pla-
reta.
La cantidad de polvo en la atmós-
era de Marte se calcula desde nuestro
¡aneta por medio de un procedimien-
10 bien conocido por los fotógrafos.
Allos saben que si intentan tomar una
'oto de una montaña o de un paisaje
ejano cuando flota en el aire una gran
antidad de polvo, es necesario el em-
Jleo de un filtro rojo o amarillo sobre
1 lente para anular la mayor parte de
os rayos azules de luz que se reflejan
1 el aire. Si la fotografía se toma sin
) filtro amarillo o peor .aún, con un
iltro azul, será tan sólo una masa sin
'orma, y la montaña distante ni siquie-
'a aparecerá en ella. Por otra parte,
2 través del filtro rojizo o amarillento,
'a luz azul reflejada por el aire es eli.
ninada y la luz roja y amarilla del
»aisaje distante llegan y son registra-
las en la placa, En esa forma se ob-
tienen fotografías tomadas desde aero-
planos a gran altura, pará evitar que
los reflejos azulados obscurezcan los
detalles de la superficie terrestre.
FOTOGRAFIANDO EL AIRE DE UN
PLANETA
Durante varios años los astrónomos
del Observatorio de Flagstaff han sa-
:ado con regularidad fotos de Marte,
tomadas a través de un telescopio, con
filtros rojos o azules frente a la placa
fotográfica.” A través del filtro azula-
do se fotografía la atmósfera del pla-
neta, con el polvo que contiene, mien-
tras que con el rojizo o amárillento se
llega a ver la superficie de Marte.
La serie de fotografías obtenidas por
el doctor Slipher en dicho observatorio
demuestran que el aire era más azul y,
por consiguiente, más polvoriento que
de costumbre en los últimos años; espe-
cialmente en los meses de abril y mayo,
en que se mostraba dos y tres veces
más opaco que el de la Tierra. El doc-
tor Slipher manifestó que parecían
existir dos posibles maneras de inter-
pretar esto. Una es que por alguna ra-
zón desconocida Marte ha retenido más
atmósfera que nuestro planeta. La otra
es que ha aparecido en el aire de Marte
una clase de polvo provisto de gran
capacidad para conservar y reflejar los
rayos luminosos azules,
,
El habitante de Marte imaginado por el
novelista H. G. Wells que sería una es
pecie de pulpo dotado de extraordinaria
inteligencia.
Posiblemente el polvo se había ori
rinado en alguna especie de hielo, quizá
somo las pequeñísimas partículas hela
(Continúa en la página 74)