MUNDO ARGENTINO
Número Dedicado a las VACACIONES
Año XXYII — 24 de noviembre de 1937 — N: MOI
HU-ciónes?
A?
YS a todos los que trabajan, hombres y mujeres,
a-quienes nos dirigimos. Es preciso que todos
- entiendan que la época que se avecina será el
- momento oportuno de salir del encierro en que
viven. Y que no se diga. que nose tienen los medios,
que las vacaciones cuestan muy caras y que el tiempo
necesario para ellas hace falta para otra cosa. Hay
vacaciones y vacaciones, desde las que se pueden to-
mar bajo una carpa por una suma diaria insignifi-
cante, hasta las que se pasan en el gran hotel de
moda a cincuenta pesos por día. No es, pues, una
cuestión de medios, sino simplemente una cuestión
ze, > _—_ y de decisión para proteger la promia
salud. ——- —-
En nuestro país la ley otorga a los que trabajan
el derecho a las vacaciones. Pero en muchos casos
el empleado a quien le llega el turno de tomarlas no
sabe qué hacer, cómo emplear su tiempo de holgan-
za. Las horas bruscamente multiplicadas durante
una quincena, lo desazonan. Confiesa, entonces, que
extraña la oficina o el taller, porque, desgraciada-
mente, confunde el recreo a que tiene derecho con
el ocio a que se entrega. Las vacaciones bien enten-
didas son para disfrutarlas en contacto con la natu-
raleza, al aire libre, ante los paisajes agrestes o ante
la estimulante presencia del mar. MUNDO AR-
GENTINO quiere difundir la convicción de que el
reposo anual ro es sólo un derecho, sino también un
deber: el deber de cuidar la salud y atender al es-
piritu. Ese es el móvil inspirador de este número de.
Ticado a las vacaciones; queremos que no sólo sirva
para destruir prejuicios, cuando existan, sino tam-
bién para orientar a nuestros lectores en todo lo re-
ferente a nuestro tema central. Y si logramos, -si:
quiera en parte, nuestra propósito, nos considerare-
mos amvlizmente recompensados.
RATA
H ASTA hace poco se creía que las vacaciones
eran. un privilegio del que sólo podían dis-
frutar las personas adineradas o de notorio bien-
estar económico. Ahora, sin embargyo,..se.em-
pieza: a. comprender que las cosas son de otro
modo, Las conquistas de una legislación más huma-
na han transformado aquel privilegio en un derecho
cada vez más extendido, Así como la jornada de
trabajo de ocho horas existe y se ha incorporado de-
finitivamente a nuestras costumbres, está a punto
de ocurrir lo mismo con las vacaciones anuales,
Es sabido que el hombre que trabaja necesita pe-
riódicamente reparar sus energías. El ser humanc
no ha sido ereado mara (Continúa en la última má-—-