JOAN 
SLONDELJ 
MARY 
vARLISLE 
la piel. Estos elementos perjudiciales 
no pueden penetrar en la piel chamus- 
cada y, como consecuencia, oprimen los 
riñones y otros órganos del cuerpo. El 
resultado puede ser envenenamiento y 
debilitamiento del sistema entero, y en 
el caso de Jean Harlow provocó un co- 
lapso y la muerte. 
Otros médicos han manifestado que 
existen profundas diferencias en las 
reacciones y condiciones físicas de las 
rubias, morenas y pelirrojas. Eso pe- 
dría indicar que las morochas son las 
más robustas, aunque no se han obte- 
nido estadísticas: exactas al- respecto. 
Sólo en na distinción entre morenas 
y blondas, las estadísticas son total- 
mente claras: las rubias, más a mem 
do que las morochas, son madres de 
mellizos. Esta es la conclusión a que 
ha arribado la Dra. Margaret Wylie, 
nspecialista de niños, después de varios 
os de estudio. - 
Algunos psicólogos han observado 
¡ue los hombres y mujeres inclinados 
(Continúa en la wvárina 55) 
AN: 
LOUL. 
N agente de prensa de Broad. 
way, Charles Washburn, desean- 
do sorprender a su patrón, Ho- 
ward Hughes, con la aparición 
le una belleza increíblemente rubía, in- 
rentó, en 19380, la frase “rubia plati- 
nada”, e hizo a Jean Harlow famosa 
en el mundo entero, Probablemente nin- 
runa otra frase haya desplegado ja- 
más el “poder de venta” de estas dos 
palabras. Al poco tiempo, todas las mu- 
jeres de un extremo a otro del país, 
y aún detrás de los océanos, se preci- 
pitaban a los institutos de belleza en 
procura del tono platinado, porque el 
cabello que aureolaba las encantaco- 
vas facciones de Jean era de una to- 
salidad hasta entonces desconocida, Y 
su brillo era extraordinario. 
Pert ahorg los médicos revelan que, 
en cierto modo, pudo haber sido esa 
misma cabellera platinada quien pro- 
vocó la. trágica muerte de Jean. Y no 
solamente sus cabellos, sino también 
:] cutis intensamente rnbio. que los 
acompañaba. En el otoño de 1936, des- 
pués. que la Harlow se obscureció la 
cabellera, quiso hacer lo mismo con su 
piel, y sufrió severas quemaduras de 
sol, que la retuvieron varios días en 
tama y originaron el decaimiento fí- 
sico que condujo a la ruina su cuerpo 
magnífico. Una persona rubias como 
ella no debió nunca exponerse a la ac- 
2ón directa de los rayos solares du- 
rante más de media hora, Las rubias 
poseen -menos resistencia al sol que las 
morochas. La razón fisiológica para 
2sto la explican el doctor Louis Polon, 
famoso dermatólogo y socio de uno de 
'os más destacados cirujanos plásticos 
Je Manhattan, el Dr. James Stotter, 
de la manera siguiente: 
—.. La piel de las personas rubias es 
e tolor blanco debido a la ausencia 
DOROTHY 
LAMOUR 
se diferencian no sólo en 
el color del cabello, sino 
también en su reacción al 
medio ambiente. 
Por _ 
LORENZO LAMONT 
del llamado pigmento granules 0 me- 
anin y, por consiguiente, carece de su- 
Hiciente poder para absorber los rayos 
altra violeta del sol, Además, el cutis 
rubio no se arruga como en el caso 
de personas más morenas, Estas corru. 
gaciones son microscópicas, casi invi- 
sibles, pero, no obstante, ellas quiebran 
la intensidad de la luz solar, Los que 
lucen cabelleras blondas demuestran, 
ambién, una gran instabílidad en reac- 
sionar a las quemaduras solares y es- 
tán más expuestas a sufrir conmocio- 
sex y envenenamientos: - 
Los efectos mortales del sol pueden 
leberse a dos factores; uno, el choque 
»roducido en los tejidos del cuerpo por 
ina exposición larga y poco habitual; 
»tro, a los efectos tóxicos de los vene- 
nos del cuerpo al serles negados los 
métodos usuales de tura a través de 
LILLIAN 
BOND 
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