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18
; de Enero de 1938
El buque fantasma
EL BOTE DE LOS MUERTOS
¡Continuación de la página 16) :
E DDEC EEEE
as sus velas tendidas pero totalmente
esierto. Durante diez días no había
ido inscripta una sola palabra en el
bro de bitácora; todo estaba en or-
en a bordo, y no había señal alguna de
motinamiento. La mesa, tendida, había
"do abandonada por la tripulación re-
entinamente, por alguna causa igno-
da. Lo que ocurrió a el “Mary Celes-
2 ha permanecido siempre envuelto |
1 un misterio impenetrable. Fué en-
-egado a su dueño en Nueva York, '
ames H. Winchester, quien se apresu-'
6 a venderlo, Pero ningún armador
uiere tenerlo, y ninguna tripulación
mbarcarse en él. En 1885 se hundió
n Cienfuegos, Cuba.
Muchas historias de fantasmas han
ido” hiladas alrededor de naufragios
omo el del “Griffin”. Hace un siglo,
TT pescador de la bahía..de Saldanha.
eréa' de la Ciudad del Cabo, avistó
or casualidad un buque sin tripula-
ión; que, de acuerdo con la leyenda,
abía sido hundido varios años antes.
Hay un buque fantasma en el Bál-
ico, y un junco que aparece en el mar
e la China. Se cuenta que otro buque,
el tamaño de una montaña, trató
na vez de abrirse paso por entre el
strecho de Dover y raspó las escolle-
as en su intento. Hace varios siglos
n la época del emperador Justiniano,
na plaga atacó a Europa, y buques
antasmas con tripulaciones de hom.
res negros y sin cabeza eran avista-
os en todos los puertos infectados.
Todas estas historias parecen fan-
ísticas, pero la mayoría de ellas cuen-
an con algún hecho positivo en qué
poyarse. Si aparece el casco del
Griffin”, el misterio de este buque se
á aclarado, aunque las terribles le
rendas a las que dió origen continua
án viviendo en la imaginación popu-
a, del mismo modo que el histórico
antasma del Holandés. Volador-y-5
uento del Viejo del Mar..
Los espejismos son frecuentes en las
:guas del Sur, según la declaración de
j. K. Spencer, que tuvo la evidencia
le que así sucedía durante un viaje
: bordo de un destructor estadouni-
lense, en las costas del Perú. Cuando
J destructor había alcanzado las Me-
illones, un grupo de islas, todos los
Tripulantes divisaron un botecito con
res hombres recostados sobre la
orda, inmóviles. El destructor avan-
:aba con: cierta dificultad por el
nar picado, pero el bote, a menos
le una milla más o menos de dis-
:ancia, parecía navegar sobre un
nar de aceite. Durante dos “días el
nuque de guerra trató de alcanzar al
Jarquito, pero la distancia entre am-
os parecía siempre la misma. Al-ter-
ser día, sin embargo, consiguieron
1proximarse, y tan pronto“ como sonó
a sirena del barco de guerra, los tres
¡ombres del bote se desplomaron, Eran
xes cadáveres, con las vestiduras he-
:has jirones. La historia de los hom-
res muertos y su extraña embarca-
ión no fué nunca aclarada.
Lo que la tripulación del destructor
reía en los primeros días, no era sino
in reflejo del botecito, que estaba en-
onces a cientos de millas de distan-
ida. El espejismo lo condujo al lugar
»xacto en que se hallaba el verdadero
»ote con sus macabros tripulantes.
¡QUE SE HIZO LA TRIPULACION?
Hay, no obstante, muchos casos de
xuques errantes, como el “Baychimo”
»m el Artico, que no son provocados
yor espejismos. Tal fué el caso de la
“Mary Celeste”. En diciembre de 1872
ué traído al puerto de Gibraltar un
ergantín americano sin - tripulación:
:| “Mary Celeste”. Este había sido en-
-»ontrado en- medio del océano con to-
(Continuación de la página ?9) -
o. Los hombres de gobierno han con-
egulido, con diversas medidas que no
s preciso mencionar, que viniesen mu-
hos millones a las: manos de los: po-
'eres públicos. Pero es oportuno pre-
untarse: ¿de dónde sale ese dinero?
A riesgo de qué se obtiene? ¿Hasta
nándo puede seguir fluyendo ese. di-
"To a las arcas fiscales? —_
Ese dinero aparece por arte de ma-
ia, ese dinero sale. del pueblo, y el
ncarecimiento de la vida es una con-
ecuencia directa. Ese dinero se obtie-
e — y esto es lo más importante —
riesgo de hundir tal vez al país. en
% más espantosa miseria por la pre-
sión anacrónica de pensar que las
tras naciones nos van a comprar las
nas y demás productos, y que des-
ués aquí, cuando ellas quieran enviar
mercadería manufactyrada, les van
poder aplicar un recargo que ordina-
'amente es del 20 por ciento con rela-
ión a otros:países, Y, finalmente, ¿has-
a cuándo podrá seguir viniendo ese
inero? Ese dinero no debe seguir vi-
iendo por los medios que se utilizan
n estos moméntos, porque, de conti-
var así, lo que hoy ocurre con la la-
a mañana nos ocurrirá con todos los
emás productos agropecuarios.
¿Cuál es la solución? Ya que, por
ifinidad de interesen creados no es
vsible todavía seguir una política de
.mplio libre intercambio, debe bus-
arse, sin pérdida de tiempo, la con-
irtación de convenios comerciales con
ts mismas características y prerro-
ativas que tenemos con aquellos paí
28 con los cuales no rige el 20 po
ento de recargo en los cambios.
La baja de las lanas...
——
¡ue nosotros, ¿A quién se le puede
.aurrir entre nosotros entrar en coni-
petencia con Inglaterra, por ejemplo,
:n productos elaborados con lana? Con
»zte país tenemos ciertas prerrogati-
ras comerciales, pero ¿acaso es sola-
mente Inglaterra la que puede ser con-
¡umidora de muestras lanas? Parece
ue lo han entendido así. Sin embargo,
ste es un error. Para que muestras
nnas en bruto tengan mercados se-
yuros y permanentes, es necesario der
, otros países, no interesa cuántos nt
¡ cuáles, las ventajas de liberal inter-
¡ambio que tenemos con Inglaterra.
Es lógico que si producimos mucho
vás lana que la que podemos colocar
manufacturada, tengamos que venderla
¡ países que-manufacturen y que ten-
yan sus centros de. colocación en me-
lores condiciones que nosotros, ya sea
vorgla posición geográfica de los mis-
nos, por el bajo costo de la produc-
ón o por el adelanto de la: organiza-
tión y la técnica, También es: lógiro
ue si esos, países nos compran, nos-
;tros tengamos que comprarles a elios.
Pero, si a un país se le dan prerrogu-
:ivas liberales, y a otro se le aplica un
recargo del 20 % en el cambio, ¿cómo
25 posible que ese país afectado pueda
trar en concurrencia frente al fa-
vorecido?
¿Qué es lo que debe estar constante-
mente asegurado y equilibrado dentro
je la economía del país? ¿Lo pasajero
o lo permanente? Parece ingenua la
oregunta; no obstante, los hechos de-
muestran que lo que se ha pretendido
7 tal vez conseguido equilibrar, por lo
menos momentáneamente, es lo pasaje-
Esta novia de 1950 será más hermosa
por haberse protegido contra el.
"Cepillo Teñido de Rojo”
En ese gran “dia entre los días”
:Ila recordará con gratitud su educa-
ón infantil en el cuidado de los
dientes y el masaje de las encías. ¡Su
onrisa será radiante... hermosa!
Y esa hermosura se deberá a quien,
muchos años atrás, le explicó la im-
»ortancia del masaje de las encias
para mantener la salud bucal.
La falta de substancias duras y
“ibrosas que las obliguen a trabajar,
hace que las encías se ,debiliten,
rriten y congestionan... Y, final
nente. la advertencia del “Cepillo
Feñido de Rojo” indica la urgente
vecesidad de darles más estimulo y
mejor circulación.
Al primer tinte rosa, consulte su
lentista. El es el más indicado para
iconsejarle que debe Ud. dar a sus
>neias más trabajo — en otras pala-
pras... “Ipana y masaje”. -
En muchos países, se enseña a los
xiños a masajearse las encías, porque
os beneficios que reporta este sen-
illo hábito de higiene, son muy
mportantes y duraderos. . Y como
omplemento indispensable, se reco-
nienda Ipana. la pasta dentifrica
¡ue ha sido especialmente preparada
,ara una doble misión: mantener los
lientes limpios x_ brillantes y, me-
ante el masaje, tonificar y fortale-
ar los tejidos de las encías.
Adopte Ud. este tratamiento bucal
inicie hoy mismo a sus niños en
an beneficiosa práctica. Tendrán
lientes brillantes, encías sanas, $”
esidas contra muchos y graves ma-
les. ¡Compre un tubo de Ipana. hov
mismo! -
IPANA
PASTA DENTIFRICA
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