| Consejas criollas
: (Continuación de la página 50)
var con el cuero. — Diciendo esto, tiró
al suelo el panza'e burro y ya se apretó
1na vincha pampa contra el pelo on-
liao y rubio.
?_ ¡Oh, y gieno! — dijo el diablo.
?_ ¡Y sin giieno! — retrucó Dios.
—. Vos sabés que la única verdad que
hay en la tierra es el amor. Negar el
amor es negarme a mí mesmo. ¿Com-
priendés, sotreta? Incendios, terremo-
:0s, pestes y guerras, todo eso es nada
uando el amor triunfa pa curar todas
as heridas y disgracias. El mundo, sin
amor, sería como una noche eterna.
» ¿Y de áhi? — retrucó el Malo.
* La noche me conviene; yo de-
iendo la noche; usted no sabe la tro-
»illa de almas que se m'entregan en
:uanto anochece, ¡Si es como pa gol-
darse la boca!...
”_.Gúeno — concluyó Nuestro Se-
ior, — aquí estamos pa defender, vos,
a escuridá y yo, la luz; defendéte,
pues.
”Y áhi nomás el Señor se arremangó
na especie, de blusa combinada con el
»hiripá, que, asigún me dijo un padre
»ura, 2 esa prienda la llaman túnica
neonsútil y que tiene la virtá de no
-ener costura y de que crece asigún va
rreciendo el cuero. -
"Ahi nomás echaron mano a los fa-
"ones. ¡Qué palas! Estuvieron como
a semana sacando lata. Largos eran
los alfajores. Parecían las vías del fie-
rrocarril, y nunca se vido un cola blan-
a más lindo que el de Nuestro Señor.
Ahi nomás comenzó la junción. Por
arriba y por abajo y por los dos cos-
ados. No se vía más que chisperío 'e
'os fierros y no conseguían cortarse.
¿Saben cuánto tiempo estuvieron
xuscando de prenderse una puñalada
> un golpe de hacha? ¡Cinco años ca-
vales! Sí, pues. -
"Hasta que al fin el diablo, como
sien diablo, se le ocurrió jugarle al
Padre Eterno una trampa que cuasi le
la risultao. Viá tener que dimostrarlo
»on mi caronero para que vean más u
menos cómo jué la cosa... ¿Esto? ¡Es
un alfiler al lao de los facones del dia-
blo y de tata Dios! La cosa jué ancina.
Mandinga venía riculando y atajandosé
somo podía los tajos y puñaladas que
e llovían, y en una d'esas hace como
que topa, pega un grito, amaga 24 la
zueva de las achuras, amaga a la pio-
losa y cayó de hacha sobre el costillar.
"¡Cristo Padre, qué hachazo! Val-
xalé que el Señor había sido lijerazo
pa cuerpiarse; si no, Mandinga hace
dos Padre Eternos de un solo tajo. Se-
torneó a tiempo y evitó la tarja.
”;Saben ande cortó Mandinga y no
yudo evitarlo Dios? Pues consiguió cor-
:arle una bolsa grandota llena de mo-
neditas de plata que Dios tráia pren-
dida del tirador con unos tientos, y que
:ráiba pa repartir entre el pobrerío.
La bolsa era tamañaza; más grande
que la Casa del Gobierno, y empezó a
Jesparramarse el monederío hasta que
se formó el río e la Plata. Di áhi
Jimana su nombre...
"Jurioso, tata Dios lo cargó de firme
11 Malo y dispuesto a hacerle sentir el
igor, Lo cargó con hacha en cruz.
”—. ¡No vale! — gritaba Mandinga,
1aciendosé un ovillo.
”— ¡Qué no va a valer, trompeta! A
zos hay que rifrescarte la memoria pa
que sepás rispetar la cruz.
"Mandinga, cuasi redotao, pegó me-
dia gielta y comenzó a disparar, a dos
laos, la cola como abanico y haciendo
sonar las pezuñas como cuhetes.
”— ¡No disparés, mulita! Encará, u
je no, te via cortar el cuero de la es-
yalda por disparador.
... Trompezó el diablo, y, no ha-
EL
"7
7
Más sellos de la España actual
Continuando la publicación de sellos de correo, con-
memorativos y de beneficencia de la España actual, que
iniciamos hace dos - números, reproducimos hoy cinco
»stampillas de las editadas por el gobierno español,
Son ellos: una dedicada a Velázquez, otra a Salvo-
chea, la siguiente al tercer centenario de la muerte de
J. Fernández, y las dos últimas al gran escritor y tri.
buno Pablo Iglesias.
».
Mai
DESEAN CANJE.
?. O. S. Desea universales, especialment
Francia, Italia, Irak, Portugal, Oriente.
Jfrece aéreas, americanas, ministeriales
F. Roberto Theumer Bolzan, Ciosswei-
er 71, Rosario de Santa Fe, Rep. Ar-
rentina. Ofrece universales y Argentina,
»r Sud América y Centro América.
Pedro Guarino, Sócrates 1423, V.- Mi-
re, Bahía Blanca. Principiante, Uni-
7ersales. Especialmente sudamericanas.
Alejo L. Vispo. Paraguay 279. Corrien-
es, Rep. Argentina, Ofrece ministeria-
es por aéreas.
Alfredo Luis Rossi. Salto 3513. Rosa-
io, Rep. Argentina. Socio L'Echo de la
"imbrologie. 37 Rue des Jacobins.
imiens (Francia).
Fernando. Zúñiga. Blandengues 1783.
Japital Federal. Rep. Argentina. Prin-
sipiante adelantado, Universales.
Tomás Kapusi, Avda. General Paz 44,
¿órdoba, Rep. Argentina. Universales.
Jorrespondencia en castellano, húngaro,
¡jemán, inglés y yugoeslavo. Principian-
e adelantado.
Alberto Pestoni, Augusto López 691,
>órdoba, Rep. Argentina. Universales.
Jorrespondencia en castellano, inglés,
taliano, Desea especialmente ministerig.
es argentinas. .
Pedro Corso, Andrés Lamas 1054, Bue-
108 Aires, Rep. Argentina, Mediano;
miversales.
Alfonso Magéán. Avenida Sarmiento
315. Rep: Argentina. Desea universales.
Jfrece sudamericanas y ministeriales ar-
zentinos, -
Enrique Callo, Córdoba 4325, Lanús,
EN HONOR DE LOS DOCTORES ELICABE Y ARATA
En honor de los doctores Ricardo Elicabe y Julio César Arata, con motivo de su
lesignación de presidente honorario y consejero de la Sociedad Filatélica Argen-
tina, les fué ofrecido un banquete en el restaurante Scajidi, la cabecera del cual ha
sido redistrada en esta totografía.
INTERCAMBIO
ximera categoría, Más no podemos ha-
ver de nuestra parte. Insistiremos nueva-
nente más adelante sobre el tema.
Alfonso Magán, Tucumán. —- “Fran-
0 filatélico”, es el valor que se asig-
18 en los catálogos a los sellos para
»olección, Facilita ese valor los canjes
7 sirve de hase a los precios reales de
os sellos. No hay bases fijas para fi-
jar los precios de los sellos. Cada casa
zomercial los justiprecia por sí misma
teniendo como base la eterna ley di
'a oferta y la demanda, y el interés
de cada cliente, Hay numerosas revis-
"as especializadas que contienen esor
latos, En un número próximo dare-
nos la lista de las principales y sus
direcciones, En cuanto al valor del ca-
álogo que me indica, se lo podrá in-
licar cualquier casa comercial, El pre-
+0 es casi uniforme.
H, L. Z, -- Ya hemos publicado esos
sellos. Fíjese en los números de julio úl-
:imo.
"MUNDO ARGENTINO” ha puesto esta
,ección a disposición de los coleccionistas
para insertar sus pedidos gratuitos de can-
e; pero lo es imposible investigar sobre la
moral de cada uno de los firmantes de las
numerosas cartas que recibe. Queda ello 3
rargo de cada Interesado, A fin de dar un
punto de referencia, ampliaremos, en lo
¡mucesivo, las indicaciones que publicamos,
mdicando cuando así nos lo digan los afl-
sonados, el club o entidad filatélica a que
Jertenecen.
_—
CORREO
Miguel F. Caputo. — Previendo los in-
onvenientes del canje entre aficionados
le distintas categorías, es que pedimos
; cada uno nos indique la cantidad de
ellos que posee o de qué entidades es
ocio, y en qué forma puede catalogár-
elo, ya sea princiniante, adelantan +
-= - e
MUNDO ARGENTINO
biendo más rimedio, encaró otra vez.
”—. | Ansí me gusta! — gritó Dios—
Y pa que veas, te viá marcar como
10mbre, sin valerme de la cruz, Y áhi
*omenzó tata Dios a mover el fierro
"omo manija de órgano, bien empuñao
11 cola blanca. Y di un redepente, ¡zas!
Un hachazo en medio 'e las guampas.
Qué hachazo macua! La piojosa del
:ondenao le quedó partida como sándia
alcallota que le hubieran sacao una
raja. Y meta sangre y sangre y san-
zre... Y di áhi jué que se formó el
tío Colorao, aunque no lo craigan.
”Cayó al suelo Mandinga. Dios le
:uró la herida y se la apretó con una
vincha; dispués, se lo cruzó en el pare-
jero y se lo llevó pa el lao del Tandil.
Allí lo tiró panza abajo en una sierra
y le encajó una tremenda piedra en
l'espalda pa castigo. Hecho lo dicho,
el Señor se ganó al cielo misturao en-
tre nubes. .
”Allí lo dejó pa que se pasara los
siglos sin hacer daño. Mandinga co-
menzó a moverse de un lao pa otro que-
riendo salirse, pero al ñudo. De áh:
se jormó la piedra movediza de Tan-
lil. Di un redepente la piedra dejó de
noverse. Era que el diablo, dispués de
muchos años, consiguió juirse de de-
ajo. Por eso es que la piedra áhura es-
-á quieta. Sí, pues, Y el que crea que
odo esto es mentira, no tiene más que
caminar unas cuadras por el lao dei
ste, y áhi nomás se topará con el río
de la Plata.
”Y tomando un tren, a unas cuantas
10ras de fierrocarril po el lao del sur,
3e topará con el río Colorao, En cuanto
1 la piedra del Tandil, tuítos la cono-
*en, y si no quieren creer que el diahlo
se ha escapao y que anda suelto, no
tienen más que comprar las gacetas
tuítas- las mañanas, y verán cómo el
Malo anda haciendo de las suyas, meta
guerras, meta crímenes y negando el
amor por tuítas partes.”
— . ,” — —
Haití desarrolla... —:
(Continuación de la página 14)
— ¿El trigo argentino, doctor?
— Un momento — mos interrumpe
nuestro entrevistado; — a eso iba yo.
La Argentina debe comprender una
vez por todas su esencial papel de gra-
nero de América, debe cuidar que su
política económica tienda casi exc:u-
sivamente a vender carne y trigo a
ambio de otros productos que no le son
fáciles cosechar en estas ubérrimas
ierras. La Argentina no es un país
de clima tropical, a pesar de tener
sonas calidas. La Argentina no podría
:osechar nunca en gran escala ni café,
Ai arroz, ni vainilla, ni añil, ete., sino
a costa de convertirlas en industrias
orotegidas... y que ya sabemos cuan.
to cuestan al erario público. Es por eso
que la Argentina debe comprender su
papel y sentirse poderosa, ya que nadie
puede competir con carnes tan sabro-
sas ni trigo en tanta abundancia.
"Las barreras aduaneras — prusi-
gue el doctor Trongé — constituyen
realmente infranqueables barreras, y
sermiten esta redundancia que tiene
tro significado: hay ciertas barreras
aduaneras que son franqueables injus-
tamente a raíz de ciertas ventajas fa-
vorables que ticnen algunas naciones,
”Esa política de favorecer, a costa
le resentir.los vínculos de paz en Amé.
rica con otros países europeos, da rer
»onsecuencia casos realmente irriso-
"os. Muchos productos que se cose-
+han en las naciones centroamerica-
1as y en las Antillas, llegan a la Ar-
rentina con rótulos de origen europeo.
Es que aún no nos hemos puesto a es-
udiar detalladamente las grandes po-
:ibilidades que nos ofrecen los pueblos
de América para un mejor entendi-
miento económico.”
