S cierto que en el Cine hay mu
chas mentiras, pero la mayor
: parte de' ellas están tan bier
1 hechas y asombran NN ma:
nera, que cualquier espectador Justifi-
ca el engaño. Gracias a todas ellas, ls
pantalla de Hollywood nos ha brinda.
de naufragios estupendamente hechos
enormes incendios, tormentas, terremo
Los y otros espectáculos, que casi siem
pre han resultado inolvidables. Clarc
que, a veces, al presenciarlos no po-
demos menos que pensar cómo han si-
do hechas esas cosas. Tan perfecta fué
la tormenta de nieve, tan natural e
desprendimiento de una montaña, tar
claro el naufragio, que se nos ocurre
que si todo eso fuese verdad no nos
habría dado una mejor impresión de
realidad. Lo cua! es cierto, ya que en
el cine, muchas veces, las cosas verda:
deras no parecen reales cuando son
reflejadas en la pantalla,
Un poco por eso y otro poco por la
necesidad de explotar lo que sea espec-
tacular, todos los estudios de Holly-
Ne debido estudiar la forma de
efectkar trucos fotográficos, mecá-
MENTIRA .
ring Kong se
108 presente
1quí tal como
0 vimos en la
'antalla. Un
:scenario en
niniatura y la
otograjía ob-
enida desde
in ángulo muy
ajo, daban la
mpresión de
jue el mono
ra algo sobre-
natural.
VERDAD
Este es el verda-
dero mono que se
empleó en la jil-
mación de “King
Kong”. Aparece
frente a Fay
Wray, y su estatu-
ra era de cincuen-
Ya centimetros.
as Ade z ee
o Vel mies de ment as que paref ver ades
VO;
10, cuya altura excedía de diez, metros,
208 trucos estaban tan bien hechos,
ue, continuamente, tuvo el público la
sensación exacta de que aquel mono
:ra algo sobrenatural, Y, sin embargo,
odo era mentira, pues “King Kong”
'ra, en la realidad, un muñeco que
nedía cincuenta centímetros y tenía
'n esqueleto de acero cubierto con una
el de conejo.
En la foto que aparece arriba está la
xotagonista Fay Wray, en las garras
lel mono, que lucha con un pájaro
:norme. Esta sensación de gran ta-
naño se logró con sólo colocar el lente
le la cámara en un ángulo muy bajo
lel set en miniatura, formado por pe-
vueños árboles, piedras y plantas. El
inimal era movido a mano, debiendo
a cámara detenerse antes de cada mo-
imiento. Luego, como el film era pro-
ectado a gran velocidad, estos movi-
ajentos parecían naturales.
Uno de los trucos fotográficos más
lejos. y que más ha Hamado la aten-
dón del público, es el que permite a
'n artista desempeñar dos personajes
¡ un mismo tiempo, como el que este
ño vimos hacer a Ronald Colman en
El prisionero de Zenda”..Para ello,
asta con impresionar la escena dos
'eces, aunque de cada vez únicamente
nedio film es expuesto. Primero, la
arte derecha del film fotografía al
trtista en un papel; luego se da vuel-
% el film, para que la parte izquierda,
que es la otra mitad que no ha sido
2xpuesta, Jo fotografíe en el otro pa-
pel. La foto que vemos en esta página
y En la que Ronald Colman aparece
solo; nos muestra cómo quedaría. el
film entero si fuese revelado, Pero es-
to es incompleto, ya que sobre la par-
te izquierda es-donde Ronald Colman
será fotografiado para hacer su otro
personaje y dar así la sensación de que
2stá frente al anterior, tal como se ve
n la otra foto en que el actor aparece
los veces.
En materia de simulaciones he visto
> los estudios de Hollywood cosas sor.
endentes, Cierta vez me invitaron a
'Continña en la nácina ricuilenta
nicos y eléctricos, Y es tal el grado
le adelanto alcanzado, que no hay si-
mulacro que no se pueda realizar, Por
1udaz que sea la idea, ésta es llevada
1 la práctica, con lo cual queda esta-
blecido que, para este aspecto de la
*inematografía, la palabra imposible
10 existe,
Hace algunos años provocó sensa-
:ión en todo el mundo un film titulado
“King Kong”, que se refería a la su-
duesta existencia de un rirantesco mo-
VERDAD
Esta es la forma cómo
tan sólo la mitad del film
Mué expuesto para una
de las escenas en que
Ronald Colman inter
preta dos papeles a un
nismo tiempo. Sobre
la parte negra que se
ve a la izquierda hará
luego su otro perso-
nose.
MENTIEA
Ya está hecho el
truco Jotográjfi-
co. Ronald Col-
man oparece aqui
2n “El prisionero
de Zenda” senta-
do a la mesa y
ante él mismo. Lo
más importante
para. estos trucos
23 la exacta no-
ción del tiempo
que cualquiera de
los dos personajes
varda en pronun-
car una frase o
hacer un determi-
nado ademán.