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El enigmático personaje Haroldo de 
Oldotredi tal como es en la actuali- 
dad, y una foto suya en el tiempo 
En que se llamada Harald Smith (a 
la derecha). 
¡DIEZ IL DOLARES a quien 
pruebe que Haroldo Oldofredi 
no es un conde auténtico! 
A semana pasada llegó a nues- 
-—. tra Editorial un caballero ele. 
gante, gallardo y peripuesto, 
que decía ser viajero y querer 
hablar con un redactor sobre un asun- 
to de actualidad. En su mano derecha 
lucía un anillo con sello nobiliario. 
Debidamente atendido, e invitado a ex- 
presarse sobre el motivo de su visita, 
*mpezó hablando así: 
— Yo vengo, señores, a hablar con 
ustedes del sonado asunto de Haroldo 
le Oldofredi.., 
— ¡Ah!, ¿sí? ¿Del supuesto conde”... 
— No, señores, del auténtico conde 
Haroldo de Oldofredi — afirmó el vi- 
sitante, poniéndose muy serio, Enton- 
ces el redactor que lo había recibido 
se incorporó en su. asiento y respon- 
dió semisonriendo: 
— Pero ¿es conde o no es conde? 
Y si es conde, ¿qué es lo que esconde 
dara que la policía lo persiga? 
Apenas un rictus se vió en Ja boca 
de Ja extraña visita, quien contestó a 
renglón seguido — 
— Si usted quiere, escribiré en su 
fevista lo que sé sobre los sucesos ocu- 
rridos, y usted lo podrá publicar con 
mi firma... 
— Muy bien, señor; aquí tiene usted 
na máquina de escribir; tome asiento. 
Dicho y hecho. El distinguido caba- 
lero se sentó y empezó así: 
“Voy a decir la verdad sobre Harald 
Smith, hoy día conde Haroldo de O!- 
dofredi; voy a decir lo que nadie ha 
dicho, pues como en todas las cosas 
*basionantes, en ésta se ha dado rien- 
da suelta a la fantasía, bordándose las 
pótesis más variadas en torno de la 
Personalidad social y delictiva de este 
ombre, que para más novela ha llega- 
do desde cualquier parte del mundo. 
"Ya dijeron los diarios que en sus 
Setates se leen rótulos del vapor Rez, 
del Normandie, del Gran Hotel Por- 
'ofino Vetta, del Bucintoro, de Vene- 
la, del Ritz Carlton y Waldorf Asto- 
“la, de Nueva York; del Morandis, de 
“San Remo, del Reforma, de México; en 
fin, si le hubiera sido posible ir a 
Marte, .. 
"Y así se escribe su historia en base 
1 lo andado y a los episodios translú- 
idos. 
"El supuesto conde — para mí wn 
verfecto conde y tan conde como el 
fue más — ha cometido, según infor- 
na el cable, varios delitos en sus an: 
lanzas por ahí. La policía argentina 
rató de comprobar si había delinquido 
1 su jurisdicción. Ya veremos cómo, 
"La gran viveza con éxito del ex- 
raordinario conde fué su abondono del 
-arco en Montevideo, pues aunque dejó 
n él su bagajes, cumplió ampliamen- 
€ con su cometido: llegar a Buenos 
tres con una maleta de mano. 
"Aquí la gente pareció interesarse 
nás que todo por la circunstancia de 
Á era conde e no lo era. Yo afirmo 
"e hay otros aspectos en torno suyo 
ue” hacen pasar a segundo término 
al circunstancia. Lo más importante 
s saber por qué tomó el avión para 
legar a Buenos Aires antes que el 
“arco. Evidentemente, que para evitar 
. la policía que lo esperaba a su lle- 
zada. Después, una vez entregado lo 
jue debía .entregar en Buenos Aires, 
oco le importó de la policía. 
"Otro detalle muy sugestivo. es: 
Quién solicitó al senador nacional que 
'ué a defenderlo sus servicios profesin- 
1nles de abogado, siendo que el conde 
10 estaba preso? 
"¡Ah! Entonces, Oldofredi ¿tenía 
r tiene relaciones en la Argentina? 
Quiénes 
son? ¿Qué 
unciones 
nternacio- 
ales des- 
mpeñan? 
"De la 
claración 
le estas co- 
as podría 
urgir algo 
nteresante 
cerca de 
ag activi- 
'ades del 
Continúa en 
2 página 36) 
75 LUISA 
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COMPROBACIONES EFECTUADAS REVELAN 
QUE EL 76 *, DE LOS MAYORES DE 17 AÑOS 
TIENEN MAL ALIENTO, Y QUE CASI SIEMPRE 
PROVIENE DE LOS DIENTES LIMPIADOS A 
MEDIAS. LE RECOMIENDO COLGATE. 
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[LA CREMA DENTIFRICA COLGATE 
COMBATE EL MAL ALIENTO 
La espuma penetrante de Colgate, llega 
hasta los más lejanos intersticios de los 
dientes, eliminando las partículas de ali- 
mentos que allí se depositan y que, gene- 
Ls ía > ralmente son la causa del mal aliento, de 
dientes: manchados y de muchas otras afecciones denta- 
les. Al mismo tiempo, el suave y seguro agente pulidor 
de Colgate limpia y da brillo al esmalte, haciendo res- 
plandecer sus dientes y dando un nuevo encanto á su 
sonrisa. 
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