CUBA CONTEMPORÁNEA
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dividuo necesita conocer y practicar, como condición esencial para
la conservación de su salud.
Las aptitudes estéticas de los alumnos, no reciben atención
alguna; tan sólo dos materias, la literatura preceptiva y la histórica,
pueden tener alguna influencia en este sentido; pero la forma en
que se estudian, destruye por completo esta influencia, convirtién
dolas en un médio de ensanchar la erudición de los jóvenes. Hay
un curso de cívica y otro de moral, completamente teóricos, de
influencia educadora, en consecuencia, completamente nula.
Asimismo, no existe en ellos ninguna forma de orientación vo
cacional. Desde estos puntos de vista, aparte de la reforma me
todológica a que me referiré inmediatamente, es necesaria la intro
ducción en los estudios secundarios de las materias siguientes:
1 ? —>La educación física en todos sus aspectos, que debe abar
car algo más que la práctica de los ejercicios de esta clase.
2>—‘Dibujo, elementos de pintura, modelado y otras formas de
trabajo manual, distribuidas en cursos electivos.
3°—Elementos de música y canto.
4 9 —Cursos de orientación vocacional.
Además, ensayos de organización práctica de asociaciones de
carácter recreativo, cívico, cultural y benéfico. Puede ser que al
gunas personas, al leer estas conclusiones, piensen en el número de
años que será preciso prolongar la segunda enseñanza para cum
plir un programa de esta índole.
A esto, basta con responder que la prolongación del período
preparatorio de los estudios constituye una exigencia cada vez más
apremiante de la cultura moderna y de la complicación de la vida
social y que a ella están cediendo los planes de estudios de todos
los países que aspiran a educar eficientemente a su juventud.
Y también, que el alargamiento del período dedicado a la se
gunda enseñanza, no sería preciso que fuera considerable y que,
aun dentro de los límites que ahora tiene, podría ensayarse la re
forma, reduciendo un poco el tiempo malgastado en explicaciones
verbales y en trabajos de memorización.
Cuando por la Orden Militar núm. 267 de 1900 se concedió a
los profesores de los Institutos libertad completa para la redac
ción de sus programas, no puede dudarse que se dió un gran paso
de avance hacia la metodización y encauce científico de la ense-