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COSMOS
Su dueño pretende que no sólo pro
nuncia tales palabras sino que compren
de perfectamente su significado» pero es
to no ha podido absolutamente compro
barse.
El cráter del Vesubio.—La
más reciente fotografía del cráter del Ve-
•v;.:v
subió es la que presentamos ahora á nues
tros lectores y fué tomada por el profesor
Malladra en los momentos en que se ini
ciaba una explosión.
Como se ve no sólo los toreros saben
hacer alarde de valentía, pues esta ha
zaña de un sabio merece ser colocada
junto á la de cualquier Fuentes.
Un experimento de tacto.
—Los experimentos de física sin apa
ratos son siempre divertidos. Uno de
los más curiosos es el siguiente, que
prueba lo defectuoso de la sensibilidad
táctil en aquellos puntos del cuerpo que
no empleamos habitualmente para tocar.
Tápense á una persona los ojos, y
píquesele ligeramente en el cuello, de
trás de la oreja, con dos alfileres cuyas
puntas disten una de otra unos dos cen
tímetros. Pregúntese entonces al pacien
te con cuántos alfileres se le ha picado,
y seguramente contestará que con uno
solo.
A la misma persona, sin destaparle
los ojos, se le suplica que se remangue
uno de los brazos, y se le aplica, contra
la piel del mismo, primero un cuadrad 1 '
lio y luego un lapicero ó cualquier otro
objeto cilindrico. Siempre que al lado
del primer objeto y el diámetro del se-
gundo no pasen de dos centímetros, el
paciente no podrá reconocer la forma
cada uno de ellos ni distinguir cuándo se
le toca con el lápiz ni cuándo con el cuí'
dradillo.
Las hormigas africanas.-"
Estos minúsculos animalejos parecen ha-
berse propuesto exceder á los constructo'
res americanos de rasca-cielos, pues gra 11 '
des llanuras del Africa las han convertid 0
en lugares montuosos y accidentados p oí
la construcción de sus nidos que con f re '
cuencia alcanzan hasta quince y vein te
metros de altura. Son tan perjudicial 5
estos bichejos como buenos constructo
res, pues no hay substancia que no de°
truyan, con excepción del hierro y e
acero.
Agujeros en el aire.—Aunq° e
los sabios no admiten la teoría, los nuevo 5
nautas del aire, han descubierto que és te
presenta diferencias de densidad que p r °
ducen la sensación de verdaderos aguJ e
A
ros, unas veces, otras de cascadas y
de columnas de gases asfixiantes.
Nuestro grabado representa un & eí °
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haber caido en un «agujero de aire»-
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